La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) informó que, tras un reporte que fue atendido recientemente en el tramo Valladolid-Tizimín, se confirmó que un supuesto “secuestro” comunicado vía telefónica se trató de un engaño de extorsión, sin que en ningún momento la persona involucrada estuviera privada de su libertad.
Según la corporación, una mujer recibió una llamada de su hijo diciéndole que estaba “secuestrado” y que, por instrucciones de terceros, debía hacer un depósito para su liberación. Gracias a la oportuna denuncia y a la intervención de policías estatales y municipales, el joven fue localizado sano y salvo en la cabecera municipal de Tizimín.
Allí se informó que fue contactado por teléfono y presionado para hacer creer a su familia que estaba retenido. El hecho fue turnado a personal de investigación y al área Antiextorsión de la SSP para las indagatorias correspondientes.
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Este tipo de engaño forma parte de las extorsiones telefónicas conocidas como “secuestro virtual” o falso secuestro, donde las y los delincuentes hacen creer que un familiar está retenido, utilizan amenazas y presión psicológica, y exigen depósitos o transferencias urgentes para “liberarlo”.
Ante este y otros casos similares, la SSP exhorta a la ciudadanía a no hacer ningún depósito ni entrega de dinero cuando reciba llamadas de este tipo, y recomienda seguir estas acciones básicas de prevención.
Mantener la calma y no continuar la llamada si se detectan amenazas o exigencias de dinero. Cortar la comunicación y llamar de inmediato al supuesto familiar para verificar su situación. No proporcionar datos personales, nombres de familiares, domicilios, cuentas bancarias ni códigos de verificación.
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Tampoco dejarse presionar por frases como “no cuelgues”, “no avises a nadie” o “tienes pocos minutos para depositar”. La ciudadanía puede denunciar y recibir orientación sobre intentos de extorsión telefónica a través del 9-1-1 y de la línea anónima 089.
La SSP invita a las familias hablar abiertamente sobre estas modalidades de engaño, acordar protocolos de comunicación entre sus integrantes y reportar cualquier llamada sospechosa.
La prevención, la denuncia y la coordinación con las autoridades son fundamentales para evitar que más personas sean víctimas de extorsión telefónica.