El presbítero de la parroquia de San Antonio de Padua, David Vivas Hernández, en víspera de la Navidad invitó a toda la población católica y a los cheneros en general a “tocarse el corazón” y compartir su cena de Nochebuena con los más necesitados, como un acto de caridad hacia las personas más vulnerables.
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Tras desear feliz Navidad a la feligresía y en general a todos los habitantes del municipio, el sacerdote exhortó a vivir el verdadero significado de la Navidad con amor, armonía, paz, felicidad y unidad entre las familias, esperando con ansias el nacimiento del Niño Jesús en sus corazones.
Añadió que la víspera de la Navidad es un tiempo propicio para practicar la caridad con los hermanos que menos tienen: los que viven solos, los viudos, ancianos y toda persona necesitada.
Vivas Hernández mencionó que el amor de Dios también nos lleva a compartir lo que tenemos, lo que Él nos concede, y que cada obra realizada con caridad, amor y generosidad hacia el necesitado, Dios la bendice y recompensa.
Finalmente, deseó una feliz Navidad a la feligresía, invitándolos a disfrutar la convivencia familiar y recordando que “la gracia de Dios les acompañe, estén contentos y unidos en estos días”, señaló.