Una clínica oftalmológica fue acusada de presuntamente defraudar a por lo menos 20 familias que ya tenían programadas cirugías oculares. Los afectados aseguran haber entregado pagos que en conjunto ascienden a más de 300 mil pesos, sin que el dinero fuera registrado por la empresa.
De acuerdo con los denunciantes, realizaron pagos constantes en la sucursal ubicada en la Gran Plaza hasta sumar alrededor de 16 mil 900 pesos por persona. La cirugía se llevaría a cabo el lunes pasado en otra clínica de la misma empresa, situada en la avenida Cobá.
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Locatarios cercanos informaron que el establecimiento no abrió durante el día de ayer, a pesar de que normalmente labora a diario. Añadieron que desde el lunes observaron movimientos inusuales, ya que el local abrió hasta la tarde y personal de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) acudió acompañado de guardias. Aunque la visita no pasó a mayores, la clínica no ha vuelto a abrir desde entonces.
La sorpresa para los pacientes llegó cuando acudieron a confirmar sus cirugías y se enteraron de que el dinero entregado en la sucursal de la plaza nunca fue registrado. Según los testimonios, al menos 20 familias fueron víctimas del mismo esquema, lo que representa un perjuicio económico cercano a los 338 mil pesos.
Los afectados mostraron comprobantes de pago con el logotipo oficial de la Clínica de Ojos; sin embargo, el responsable del establecimiento les informó que la empresa no se haría cargo, argumentando que nunca recibió esos recursos.
Ante la falta de respuesta, los pacientes acudieron a la Profeco, donde —aseguraron— fueron ignorados y les informaron que no podían hacer nada al respecto. Esto generó mayor molestia, ya que varios tenían cirugías urgentes programadas.
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Algunos familiares optaron por volver a pagar los casi 17 mil pesos para no retrasar los procedimientos, debido a que su salud visual se deterioraba con el paso de los días. Otros decidieron acudir a la Fiscalía General del Estado para interponer una denuncia penal por fraude.
Cabe señalar que no es la primera vez que esta empresa se ve envuelta en polémicas. Años atrás, pacientes denunciaron haber sufrido infecciones presuntamente provocadas por un químico utilizado durante los procedimientos. Además, en sus redes sociales se observan múltiples comentarios de usuarios que los acusan de presuntas estafas y malas prácticas.