Los pescadores libres de Puerto Juárez atraviesan una temporada complicada debido a la baja actividad; las condiciones climáticas desfavorables y la falta de apoyo por parte de las autoridades los afectan, aseguró Edilberto, un pionero local.
Otros denunciaron que, hasta el momento, no han recibido ningún tipo del Gobierno, a pesar de que este fue prometido para la temporada del mero, misma que inició a finales de abril. “Hay varios de mis compañeros que recibieron el apoyo anual de 7 mil pesos, pero a mí nunca me llegó; no apareció el depósito por parte de la autoridad”, señaló Edilberto, evidenciando la falta de entrega de recursos a algunos pescadores en la comunidad.
En un intento por mejorar sus capturas, una de las lanchas “Jenni” realizó una jornada de palangre (pesca) durante dos días, con una inversión aproximada de 18 mil pesos que incluyó gastos en hielo, gasolina y alimentación para la tripulación. Sin embargo, sólo lograron recuperar cerca de 8 mil pesos en pesca, lo que dejó una perdida neta de 10 mil que aún deben cubrir. “No hubo ganancias, ni siquiera se reembolsaron los gastos. Se perdieron 10 mil pesos que todavía están pendientes”, afirmó Edilberto.
El marinero informó que durante la última semana sólo han podido salir en lanchas entre una y dos veces al día, generalmente por la mañana, debido a los fuertes vientos y la inestabilidad del clima. Actualmente se encuentra limitada la temporada de pesca para la langosta, pulpo caracol y camarón. Además, apenas inicia la captura de mero, la cual representa un beneficio para los pescadores, ya que en un solo día pueden recolectar hasta 100 kilogramos. No obstante, esta situación se ve afectada por la disminución en los precios del pescado, que han bajado de 180 a lo mucho 120 pesos por kilo.
El Frente Frío 42 ha estado afectando varias zonas de Quintana Roo, incluyendo las playas de la ciudad, donde se registraron temperaturas que oscilaron entre 34°C y 20°C, con una sensación térmica de hasta 39 grados. Esta situación climática ha impactado la actividad pesquera, de la cual dependen totalmente los pescadores locales, quienes esperan que las condiciones mejoren en las próximas semanas para reactivar sus labores.