Yucatán tiene un gran número de zonas arqueológicas importantes para visitar durante las vacaciones de Verano, y esto dependerá del tipo de viaje que realices.
Y es que las zonas arqueológicas de Yucatán son paradas importantes durante la visita al estado debido a su relevancia histórica sobre las antiguas culturas que vivían en la entidad.
Conocer las grandes edificaciones, esculturas y museos generan mayor importancia a la visita, conociendo más a fondo toda la historia del estado.
Cada zona arqueológica de Yucatán tiene su propio encanto, ya sea que se busque una aventura, una experiencia espiritual, un viaje familiar o una escapada romántica, hay una opción perfecta para cada situación.
Por ejemplo, para una primera visita a Yucatán, Chichén Itzá es parada obligatoria, donde se conocerá la pirámide de Kukulkán, el Juego de Pelota, el cenote sagrado y el Observatorio.
Para experiencias tranquilas se tiene Ek Balam, sitio arqueológico combina la majestuosidad maya con un entorno natural perfecto para quienes buscan paz, conociendo La Acrópolis, donde se puede subir y contemplar la selva desde las alturas y tomar fotografías espectaculares.
Los aventureros también tienen su lugar especial y es Oxkintok, ideal para conocer el laberinto de Satunsat y sus estructuras poco restauradas que conservan un aire enigmático mientras se exploran las grutas cercanas.
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Si tu idea es viajar en pareja se encuentra Xcambó, rodeada de manglares y salineras, es una joya tranquila cerca de la costa, con pirámides bajas llenas de vegetación ideal para escapadas románticas y descansar.
Finalmente, si se trata de un viaje familiar, Uxmal es ideal, siendo una de las zonas arqueológicas mejor conservadas y con instalaciones adecuadas para todas las edades. Se podrá conocer la Pirámide del Adivino, el Cuadrángulo de las Monjas y el Palacio del Gobernador.