Para María de la Luz May Reyes, artesana local, la construcción de la plaza pública, donde tradicionalmente exponía sus productos, representa más que una obra urbana. Volver al Mercado de Artesanías y abandonar el Parque Ignacio Zaragoza, donde estuvieron tras el incendio, será el regreso a un espacio emblemático de lucha y esperanza para comerciantes y promotores culturales.
El proyecto comenzó en diciembre de 2024, y según el programa de obra, su conclusión está prevista para agosto. Sin embargo, el último reporte de la Dirección de Obras Públicas indica que la construcción está avanzada, con la colocación de dovelas en el pasillo principal, lo que dará identidad arquitectónica al recinto.
La inversión del nuevo Mercado de Artesanías es de 25 millones de pesos con recursos municipales. Contará con 50 locales comerciales, salón de talleres, baños para hombres, mujeres y personas con discapacidad, además de un área administrativa. Sin embargo, los artesanos aún desconocen la fecha exacta de entrega. Pese a ello, May Reyes expresó su entusiasmo por el avance de los trabajos: “Lo único que vemos es que está muy avanzado y al menos me siento contenta. Bendito Dios falta menos”, declaró.
El mes de julio será clave para la comunidad carmelita, ya que con la llegada de las fiestas en honor a la Virgen del Carmen, cientos de peregrinos de Tabasco, Veracruz y otras partes del país visitan la isla. Esto representa una gran oportunidad de venta para los artesanos, quienes esperan recibir a los visitantes en su nuevo espacio.
Desde su perspectiva, el regreso al Mercado de Artesanías es más que un beneficio económico. “Ese era nuestro anhelo. Al llegar ahí, siento que vamos a recuperar el éxito”, dijo con emoción, destacando que el proyecto no solo representa un nuevo espacio físico, sino la recuperación de identidad y pertenencia para la comunidad.
Los artesanos esperan estar instalados en el nuevo mercado antes de las fiestas patronales, que inician en junio y concluyen en agosto, pero alcanzan su punto máximo en julio. Actualmente, su ubicación los acerca al Santuario Diocesano Mariano de Nuestra Señora del Carmen, un sitio clave para el turismo religioso, aunque muchos consideran que el Parque Zaragoza era un punto de encuentro esencial para su actividad comercial.
JGH
