
El reciente funeral del Papa Francisco ha captado la atención mundial no solo por la solemnidad del evento, sino también por detalles particulares sobre las tradiciones funerarias vaticanas. Un aspecto que ha generado especial curiosidad es el material utilizado para su ataúd: una combinación de madera con un revestimiento interior de zinc.

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Las particularidades del féretro papal
A diferencia de sus predecesores, quienes fueron colocados en catafalcos (plataformas ceremoniales acondicionadas con cojines), el pontífice argentino dejó instrucciones específicas para permanecer en un féretro abierto durante su funeral. Esta decisión refleja la sencillez que caracterizó su papado, optando por un ataúd menos ornamentado pero funcionalmente adecuado para los rituales que seguirían a su muerte.
Propiedades científicas del zinc
El zinc es un metal con características físico-químicas que lo hacen ideal para esta función:
- Presenta un color blanco azulado característico
- En aire seco no sufre alteraciones significativas
- Al exponerse a la humedad, forma una capa protectora de óxido
- Posee gran resistencia a la deformación
- Ofrece excelente protección contra la corrosión
Estas propiedades han convertido al zinc en un material ampliamente utilizado en diversas industrias, desde el galvanizado de estructuras de acero hasta la fabricación de baterías, piezas de fundición, y en la metalurgia de metales preciosos.

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La función práctica del zinc en los féretros
La inclusión de un revestimiento de zinc en los ataúdes papales responde a razones principalmente prácticas:
- La madera, por su naturaleza porosa, permitiría que el oxígeno accediera fácilmente al interior del féretro, acelerando la descomposición del cuerpo.
- Sin una barrera adecuada, los gases generados durante el proceso de putrefacción podrían liberarse al exterior.
- Los rituales funerarios vaticanos suelen extenderse durante varios días, lo que requiere la preservación del cuerpo por periodos prolongados.
Evidencia científica
Un estudio publicado en 2019 por investigadores de la Universidad de Murdoch (Australia) demostró que los féretros con revestimiento de zinc mantienen el ambiente microbiológico y químico del cuerpo en condiciones más estables durante periodos prolongados, lo que favorece una descomposición más lenta y controlada.
El revestimiento actúa como una barrera hermética que aísla el cuerpo de las condiciones ambientales externas, contribuyendo a mantener la dignidad durante todo el proceso funerario.
Tradición compartida con otros papas
Es importante señalar que el uso de zinc en los féretros papales no es exclusivo del Papa Francisco. Sus predecesores también fueron sepultados en ataúdes con este tipo de revestimiento metálico, estableciendo una tradición que combina el respeto por la simplicidad de la madera con las ventajas prácticas de la ciencia moderna.