
En Quintana Roo, 12 mil hectáreas de selva son arrasadas cada año, superficie que se reforesta en un lapso de seis, 2 mil hectáreas en 12 meses, de acuerdo con datos del censo agropecuario del Inegi.
Las miles de hectáreas destruidas, principalmente por el desarrollo urbano, superan con creces la reforestación que se realiza, afirmó Rafael Reynoso Valdez, delegado de la Asociación Mexicana de Arboricultura (AMA).
Explicó que el impacto es difícil de cuantificar debido a la magnitud del desmonte, pero las acciones de arborización son insuficientes.
“El problema es que lo que se desmonta o deforesta es demasiada superficie”, esa cantidad no se alcanza a cubrir con campañas pequeñas; se necesita detener esta tendencia en fraccionamientos y multiplicar la reforestación.

Plantar 10 árboles por persona, el objetivo ideal
En promedio, un ser humano necesita del oxígeno que generan 10 árboles a lo largo de su vida, por ello plantar uno, no es suficiente, así que por lo menos ese número sería el mínimo, de acuerdo con el entrevistado.
Indicó que hay varios caminos en los que puede apoyar un ciudadano, entre ellos puede solicitar en donación a la Dirección de Ecología árboles cuando tengan un espacio en su parque, en su camellón o si hay un espacio en su mismo hogar.
Señaló que Cancún cuenta con una paleta vegetal donde se especifican qué especies y el lugar donde se pueden colocar, por lo que no hay pretexto para no plantar un árbol, además de unirse a actividades y campañas de arborización como la que lleva a cabo el Gobierno municipal.

Efectos de la deforestación
Miguel Ángel Suárez Sarabia, director de Cambio Climático de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (Sema), explicó que la deforestación causada por los desarrollos inmobiliarios, siembras agrícolas y el que haya cada vez más vehículos, son factores que a nivel local causan que los cambios de temperatura se sientan inmediatamente, por el aumento de emisiones de carbono y la reducción de medios para mitigarlas.
“Cuando tú deforestas se liberan gases de efecto invernadero, incluso por el manejo de vertederos”, comentó. La maquinaria que se utiliza igual genera emisiones, pero al momento de tirar un bosque o de quemarlo, toda esa biomasa se convierte otra vez en gases.
Respecto al parque vehicular, según datos del Servicio de Administración Tributaria de Quintana Roo (Satq), en la entidad hay registrados un millón 650 mil unidades, entre auto, camiones, remolques, motos y omnibuses, entre otros.