La Secretaría de Salud federal se mantiene en vigilancia sobre un caso de sarampión en Yucatán, siendo el primero que se registra en la entidad en los últimos 30 años.
Autoridades de la salud activaron un operativo de vigilancia epidemiológica en la entidad para monitorear sobre más posibles casos relacionados con el detectado recientemente.
En el Boletín Informativo sobre la Situación Epidemiológica de Enfermedades Prevenibles por Vacunación en México, correspondiente al 2 de mayo se confirmó un caro de sarampión en el municipio de Valladolid.
La Secretaría de Salud hasta su semana 17 ha confirmado 789 casos de sarampión en el país, distribuidos en 10 entidades federativas y se han identificado los genotipos B3 y D8.
Sarampión en Yucatán
En Yucatán los casos más recientes de sarampión datan de 1994 cuando se registraron 17 contagios en Motul, Cansahcab y Dzemul, y desde 1995 no se habían detectado novedades sobre ellos.
Actualmente, en la entidad solamente hay un caso, mientras que Chihuahua concentra la mayoría de los contagios, con 761 casos (96.45%), seguido de Sonora con ocho.
Campeche, Oaxaca y Zacatecas reportan cuatro cada uno; Durango, tres; Tamaulipas, dos, y uno en Querétaro, Sinaloa y Yucatán, respectivamente.
Hasta el momento, se ha confirmado una defunción por complicaciones de sarampión en Chihuahua. La víctima fue un hombre de 31 años, sin antecedente de vacunación.
¿Cómo se transmite y cuál es su tratamiento?
En una persona infectada con sarampión, el virus se encuentra en las secreciones de la nariz y la faringe. Cuando tose o estornuda, las gotitas de saliva que expulsa pueden transmitir el virus y causar la enfermedad.
No existe un tratamiento antiviral específico para el sarampión; sin embargo, para evitar complicaciones graves la atención incluye una nutrición adecuada, la ingesta de líquidos, el tratamiento de los cuadros de deshidratación, la prescripción de antibióticos en caso de ser necesarios (por infecciones de ojos, oídos o neumonía) y la suplementación de vitamina A. Este último, con un comprobado efecto para reducir la mortalidad.
