Padres de familia de la escuela primaria indígena Chacpuczical alzaron nuevamente la voz, exigiendo la atención urgente de las autoridades educativas ante la falta de suministro eléctrico en el plantel, un problema que se arrastra desde hace casi dos años y que afecta directamente a cerca de cien estudiantes.
En una protesta pacífica realizada a las puertas de la escuela, los tutores portaron pancartas y denunciaron públicamente las condiciones críticas en las que se encuentra la institución.
La falta de energía y el intenso calor característico de la región ha agravado aún más la situación, ya que los ventiladores no se pueden utilizar, al igual que la bomba para suministrar agua a los servicios sanitarios, lo que impide un entorno digno para el aprendizaje. Exigen una revisión integral del sistema eléctrico del inmueble, tras reiterados intentos fallidos por parte de las autoridades.
El director del plantel, Vicente Cetzal Pat, relató que esta es la segunda vez que los padres se manifiestan públicamente.
La primera protesta ocurrió el 3 de abril pasado, cuando personal de la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de Yucatán (Segey) acudió a cambiar la base del medidor y el bajante, logrando un restablecimiento parcial del servicio por dos semanas. Desde hace más de un mes, el colegio volvió a quedar sin electricidad.
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Cetzal Pat señaló que, desde su llegada al cargo, ha gestionado soluciones junto con el comité de padres y autoridades locales, sin obtener resultados definitivos.
Padres como María de la Cruz Canché y Duly Maas expresaron su preocupación por el deterioro del proceso educativo, pues la falta de servicios ha obligado a suspender clases por medios turnos, lo que repercute gravemente en el aprendizaje de los alumnos.
“Ya es hora de que nos escuchen, los niños se están atrasando mucho por este asunto”, afirmó Duly Maas.
Cetz Tec insistió en que la situación no puede seguir siendo atendida con soluciones temporales, y pidió que se envíe a personal certificado para resolver de raíz el problema.
Hace algunas semanas, el ingeniero electricista Jesús Pech Chalé, en representación de la Segey, realizó un diagnóstico del sistema, pero a la fecha no se ha dado una respuesta al respecto.
