
Irán amenaza con una “respuesta dolorosa” a Israel por ataque que mató a militares y científicos nucleares
El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, advirtió que Israel enfrentará un castigo severo y doloroso tras los recientes ataques aéreos en Teherán, en los que murieron altos mandos de la Guardia Revolucionaria y científicos del programa nuclear del país.
La amenaza se produce en medio de la creciente tensión regional y con negociaciones nucleares con Estados Unidos en curso.
“Con este crimen, el régimen sionista se preparó un destino amargo y doloroso, y sin duda lo recibirá”, señaló Jameneí en un comunicado difundido en sus canales oficiales. Confirmó la muerte de militares y científicos clave, aunque sin precisar el número exacto. Agregó que los sucesores de los fallecidos ya retomaron sus funciones estratégicas.
Según medios iraníes como IRNA, entre las víctimas estarían el comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria, Hossein Salamí, y al menos dos científicos nucleares, además de civiles en zonas residenciales del norte de Teherán, donde se reportaron múltiples explosiones desde las 3:30 horas (hora local).
El portavoz militar iraní, general Abolfazl Shekarchi, aseguró que tanto Israel como Estados Unidos “recibirán una bofetada contundente”, marcando el inicio de posibles represalias.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, confirmó la autoría del ataque y lo calificó como una medida para “contrarrestar la amenaza iraní a la supervivencia de Israel”. Afirmó que las operaciones continuarán “el tiempo que sea necesario”.
Mientras tanto, el secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, aclaró que Estados Unidos no participó en el operativo, aunque reconoció el derecho de Israel a actuar por su seguridad. Aseguró que la prioridad de Washington es proteger a sus fuerzas desplegadas en la región.
Este ataque ocurre en medio de un proceso de negociaciones nucleares entre Irán y EE.UU., cuya nueva ronda estaba programada para este domingo. La escalada de violencia podría complicar aún más las ya frágiles conversaciones diplomáticas.
La comunidad internacional sigue con preocupación los acontecimientos, ante el riesgo de un conflicto regional de mayores proporciones.
IO