La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, fijó una postura clara frente al accidente registrado en la Línea Z del Tren Interoceánico del Istmo de Tehuantepec: la prioridad absoluta es la atención a las víctimas, seguida del esclarecimiento técnico y legal de lo ocurrido, y finalmente la garantía de que la infraestructura ferroviaria opere con plena seguridad.
Durante su mensaje en conferencia mañanera, la mandataria también defendió la solidez de las obras ferroviarias construidas desde el sexenio pasado, al subrayar que todas cuentan con certificados de seguridad y cumplen con estándares técnicos internacionales.
Atención a víctimas, la primera obligación del Estado
Ante cuestionamientos sobre señalamientos en redes sociales y críticas políticas, Sheinbaum evitó entrar en confrontaciones y reiteró que un gobierno con enfoque humanista debe poner siempre en el centro a las personas.
Recordó que esta visión ha guiado casos como Pasta de Conchos y el Plan de Justicia para Cananea, y sostuvo que el accidente ferroviario no es la excepción.
La presidenta confirmó que desde el primer momento se desplegó un operativo integral con la participación de la Secretaría de Marina, autoridades de salud y equipos de atención a víctimas, y adelantó que se trasladará a la zona para dialogar directamente con familiares y personas lesionadas, a fin de verificar que estén recibiendo toda la atención necesaria.
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Investigación sin especulación y con rigor técnico
Sheinbaum enfatizó que no se debe especular sobre las causas del accidente. Explicó que la Fiscalía General de la República y la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario son las instancias responsables de realizar los peritajes correspondientes, los cuales abarcarán la revisión de la locomotora, las vías, los sistemas de operación y la conducción del tren.
Un elemento clave de la investigación es la llamada “caja negra” ferroviaria, ya bajo cadena de custodia de la FGR. Este dispositivo registra datos como velocidad, frenado y operación del tren, lo que permitirá reconstruir con precisión lo ocurrido y deslindar responsabilidades, si las hubiera.
Certificados de seguridad en obras ferroviarias
Frente a llamados de la oposición para frenar la construcción de trenes y someterlos a auditorías generales, la presidenta fue tajante. Señaló que las líneas ferroviarias construidas durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y las que actualmente están en desarrollo cumplen con todos los requisitos técnicos y cuentan con certificados de seguridad.
Recordó que, como parte de los protocolos internacionales, antes de cada recorrido un vehículo explorador revisa la vía para detectar fallas, deformaciones u obstáculos.
En el caso del accidente reciente, dicho vehículo reportó que la vía se encontraba en condiciones óptimas, información que también será analizada por las autoridades investigadoras.
Revisión integral antes de reanudar operaciones
Sobre el futuro de la Línea Z, Sheinbaum explicó que primero debe concluirse la atención de la emergencia y el análisis de causas.
Solo después se podrá informar cuándo podría reanudarse el servicio, siempre tras una inspección exhaustiva que garantice condiciones seguras, tanto en esa línea como en el resto del sistema ferroviario, si así se determina.
La mandataria aseguró que su gobierno actuará con seriedad, responsabilidad y transparencia, manteniendo informada a la población conforme avancen las investigaciones.
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