
La madrugada de este jueves se registró un nuevo episodio de violencia política en Oaxaca. El presidente municipal de Santiago Amoltepec, Mario Hernández García, fue asesinado junto a dos policías municipales tras una emboscada en la carretera que conecta la cabecera municipal con la comunidad de Piedra Liza.
De acuerdo con los primeros reportes, el edil regresaba de una celebración patronal en Llano de Tigre cuando la patrulla en la que se trasladaba fue atacada con armas de alto calibre en un punto conocido como “El Tablero”, cercano a la comunidad El Mamey.
A pesar de ser trasladado con vida a una clínica local y posteriormente a un hospital en Teojomulco, Mario Hernández falleció en el trayecto debido a la gravedad de las heridas.
De manera extraoficial, se reportan al menos tres personas más heridas. La Fiscalía General del Estado de Oaxaca confirmó el ataque y la muerte de tres personas, incluyendo al edil.

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Este crimen se suma a una cadena de asesinatos en la región. El 8 de enero de 2025, el hermano del alcalde, Laurencio Hernández, también fue ejecutado.
En mayo de 2024, el síndico municipal, Gaudencio Hernández, y su hijo fueron asesinados por presuntos integrantes de un grupo armado local.
Asimismo, en 2023, el tesorero municipal y otros familiares de exautoridades fueron ejecutados en distintos hechos.
La ola de violencia política también afecta a otras regiones del estado. En mayo de 2025 se reportaron los asesinatos del regidor de Santiago Niltepec, un excandidato en Santa María Ipalapa y líderes sindicales en San Pedro Pochutla y Santiago Pinotepa Nacional.
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