
En Yucatán es común encontrar baños con tres llaves de agua en lugar de las dos habituales para agua caliente y fría como predominan en otras regiones de México y el mundo, lo cual siempre ha sido un misterio para los foráneos.
Esta particularidad tiene raíces tanto prácticas como culturales, ligadas al clima, la infraestructura hidráulica y costumbres locales que han evolucionado con el tiempo en la entidad.

Noticia Destacada
¿Por qué se va la luz en Yucatán? Las claves detrás de los apagones que afectan a miles de personas
Y es que la tercera llave, en muchos casos, no está conectada a una fuente de agua caliente como se pensaría, ya que en realidad, muchas viviendas y edificios yucatecos no cuentan con calentadores de agua debido al clima cálido y húmedo de la región.
Durante gran parte del año, el agua almacenada en tinacos se mantiene a una temperatura templada o incluso caliente por sí sola, haciendo innecesario el uso de calentadores.
Por ello, la tercera llave se implementa como parte de un sistema tradicional donde se separa el agua potable de la que se utiliza para tareas de limpieza o higiene. Sirve comúnmente para tareas del hogar, incluso para la higiene de partes del cuerpo como los pies, facilitando estas labores.
Las tres llaves de agua en los baños de Yucatán refleja una mezcla de adaptaciones climáticas, hábitos locales y soluciones prácticas que han perdurado a lo largo del tiempo, y lo que puede parecer un misterio para los foráneos, es en realidad una muestra de la creatividad y adecuación de la vida cotidiana a las condiciones únicas de la Península de Yucatán.