La temporada de captura del mero arrancó con cifras por debajo de lo esperado en el litoral yucateco, especialmente en la franja costera que va de Celestún a El Cuyo, lo que ha generado preocupación entre los líderes del sector pesquero.
Así lo dio a conocer Enrique Sánchez Sánchez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera y Acuícola (Canainpesca) en Yucatán.
Aunque la meta para este año se mantiene entre 4 mil 800 y 5 mil toneladas, las primeras salidas de las embarcaciones revelan un panorama poco alentador. “En esta primera ronda, los barcos están regresando con apenas entre mil 500 y mil 800 kilos de pescado. Lo preocupante es que esta baja se concentra en la zona costera que usualmente tiene una participación más fuerte”, advirtió Sánchez Sánchez.
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Estas declaraciones fueron ofrecidas tras una reunión del Comité Estatal de Pesca, realizada hace un par de semanas, en la que participaron autoridades federales y estatales como la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), el Mipas Nacional y la Secretaría de Pesca de Yucatán, encabezada por Lila Frías.
Durante el encuentro, se discutieron cifras preliminares de la producción nacional y se abordaron inquietudes sobre el estado de las principales pesquerías de la península, con el mero como uno de los recursos más representativos. Aunque aún no se cuenta con un cierre oficial de la temporada anterior, el sector mantiene la expectativa de al menos igualar las cifras del año pasado.
Tiempo extremo, un obstáculo
Uno de los factores que más ha influido en la baja producción es el comportamiento del tiempo. Tradicionalmente, mayo trae lluvias que mejoran las condiciones en altamar, pero este año, al igual que en 2024, no hubo precipitaciones el mes pasado.
“Este año, el calor intenso está complicando más el panorama”, explicó el líder pesquero. Ante ello, muchos pescadores han optado por capturar otras especies como rubia o canané, mientras esperan el inicio de la temporada de langosta, en julio, y de pulpo, en agosto, dos pesquerías clave de la economía no sólo del sector sino del estado.
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Acuacultura y maricultura
Como parte de las estrategias para fortalecer al sector, se discutieron también los programas que se están gestionando en colaboración con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), con enfoque en repoblamiento de especies, acuacultura y maricultura especializada.
Sánchez Sánchez destacó el impulso de proyectos piloto para el cultivo de algas, ostiones y otras especies de escama que podrían adaptarse a las condiciones del litoral yucateco. Asimismo, señaló que la tilapia representa una gran oportunidad en materia de acuacultura, aunque advirtió que su desarrollo requiere inversión, proyectos técnicos sólidos y programas de apoyo.
“Por eso es importante el trabajo conjunto con la FAO y con Conapesca para canalizar los recursos necesarios”, concluyó.
