
Existe una estructura nubosa de desarrollo vertical, que puede indicar la pronta aparición de poderosas lluvias y tormentas acompañadas de actividad eléctrica. Su forma de montaña o yunque, así como su gran altitud revelan su presencia cuando se manifiesta en el horizonte.
Se trata de las nubes cumulonimbus, consideradas las madres de todas las nubes, densas formaciones creadas por corrientes de aire cálido y húmedo que ascienden rápidamente, y que representan su fuente de "combustible".
Su aparición es un indicador de cambios en el tiempo, y su desarrollo puede generarse, incluso en un día soleado. La base puede formarse entre los dos y los tres kilómetros de altura, y de acuerdo con registros, en casos extremos puede alcanzar hasta los 20 kilómetros de altitud.

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¿Cuáles son los peligros asociados a este tipo de nubes?
Entre los riesgos asociados a este tipo de nubes, se encuentran los rayos, poderosas descargas de electricidad natural que pueden generar incendios o caer sobre la población civil. Los tornados, imponentes fenómenos meteorológicos responsables de causar daños materiales y pérdidas humanas también se relacionan con las cumulonimbus.
Debido a su presencia también es posible que se produzcan ráfagas de viento descendentes, las cuales pueden provocar daños considerables y levantar objetos. Además, la caída de granizo siempre es latente, causando amenazas para los cultivos, vehículos, estructuras y por supuesto, también para las personas.