
Si bien Campeche tiene la mejor miel del mundo y es el principal productor de México con hasta ocho mil toneladas anuales, superando incluso a Yucatán, su precio ha caído drásticamente de 55 mil a 25 mil pesos por tonelada debido a una campaña de desinformación que ha hecho creer al mercado internacional que la miel campechana está contaminada con glifosato.
Así lo señaló Francisco García Manilla, delegado de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), quien subrayó que la apicultura es el principal cultivo del estado. Además, destacó que el próximo 24 de abril, durante el Foro Binacional en Champotón, la República de Belice reconocerá las buenas prácticas apícolas de Campeche.

García Manilla informó que en Campeche hay 11 mil apicultores, principalmente en Hopelchén, Champotón y Campeche, y que el 95% pertenece al sector social, beneficiado por programas de los gobiernos federal y estatal.
Aunque la producción de miel es cíclica y variable, el estado genera entre 7 y 8 mil toneladas anuales, de las cuales, cerca de 3 mil toneladas se venden en Yucatán, Tabasco, Veracruz y Guatemala, debido a que ofrecen mejores precios y porque la miel campechana cuenta con todos los análisis que la certifican libre de glifosato.
El funcionario resaltó que el Gobierno Estatal ha invertido en el sector apícola, entregando azúcar, colmenas y otros apoyos, además de fomentar la convivencia sana entre agricultores y apicultores.
No obstante, admitió que la caída del precio se debe a que “hemos malinformado al mercado”, por lo que es urgente reposicionar la miel de Campeche, destacando su calidad mundial.

“La miel de Campeche se vende a granel, y debemos comercializarla envasada y con valor agregado para que los beneficios económicos se queden en el estado y se generen empleos para los campechanos y sus hijos”, afirmó.
Finalmente, García Manilla señaló que gracias al programa Jóvenes Construyendo el Futuro, alrededor de 2 mil hijos de apicultores ya participan en la recolección de miel, lo que garantiza la continuidad de la producción en las próximas generaciones.
JGH