
La situación financiera de los proveedores directos de PEMEX continúa deteriorándose ante la falta de pagos por parte de la paraestatal, al grado que algunas empresas ya enfrentan embargos de cuentas bancarias por parte del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), mientras que otras permanecen en la incertidumbre fiscal por opiniones de cumplimiento negativas emitidas por el SAT, que les impiden firmar nuevos contratos, afirmó Gonzalo Hernández Pérez, vicepresidente del Consejo Coordinador Empresarial de Ciudad del Carmen (CCEC), al señalar su preocupación por que esta crisis amenaza con derivar en más despidos masivos y cierre de empresas.
“Ya se han presentado embargos por parte del IMSS en algunas empresas. El SAT aún no ha embargado, pero muchas tienen opiniones negativas que les impiden operar con normalidad. Sin ingresos y con las cuentas bloqueadas, es prácticamente una sentencia para las proveedoras de PEMEX”, dijo.
El empresario explicó que el IMSS comienza con embargos tras cuatro o cinco meses de impago, especialmente cuando se trata de empresas de gran tamaño con altos montos adeudados. En contraste, el SAT mantiene una postura aparentemente más flexible, emitiendo multas y advertencias, pero sin proceder aún al congelamiento de cuentas, aunque una Opinión de Cumplimiento negativa les impide trabajar.
Reconoció que, a pesar de las peticiones del sector empresarial para obtener prórrogas o facilidades ante el IMSS, INFONAVIT y el SAT, la respuesta ha sido nula.

“Los delegados de las tres dependencias en Campeche nos han dicho que no tienen facultades para diferir pagos o dar prórrogas, que eso tendría que venir de una instrucción a nivel nacional, lo cual no ha ocurrido”, lamentó.
Además de las obligaciones federales, muchas empresas también enfrentan adeudos con gobiernos locales por impuestos y derechos como el predial o permisos de funcionamiento. En la mayoría de los casos, han optado por reducir al mínimo sus operaciones, mantener únicamente al personal indispensable y, en algunos casos, acordar liquidaciones diferidas con sus trabajadores.

Hasta la fecha, el sector empresarial calcula más de 10 mil empleos perdidos en Carmen a consecuencia del impago de PEMEX, por lo que Hernández Pérez advierte que, de no cumplirse el compromiso de pago federal anunciado para julio y agosto, el panorama podría empeorar drásticamente.
“Ya hay empresas grandes como Schlumberger, Baker, Halliburton, Diavaz, Cotemar que están en riesgo, que, pese a tener otras fuentes, están viendo que no hay flujo en efectivo. Entonces vendrán más despidos, más cierres de empresas, el panorama se está recrudeciendo”, sostuvo.
Finalmente, el empresario señaló que, si bien mantienen la esperanza de una solución, ya han comenzado a operar en su mínima expresión, esperando que los compromisos de pago se cumplan en las próximas semanas, antes de que la situación se vuelva insostenible.