
La Universidad Autónoma del Carmen (UNACAR) requiere de 20 millones de pesos para poder cubrir los pagos para los jubilados sindicalizados correspondientes a los meses de noviembre y diciembre, informó la rectora, Sandra Martha Laffón Leal, quien explicó que se han utilizado los ahorros del año pasado y economías internas para cumplir con las aportaciones, pero reconoció que no alcanzan para cerrar el año completo y solo les queda para cubrir octubre.
Cuestionada sobre la reunión que sostendría con el grupo de jubilados sindicalizados con la finalidad de informar sobre la cuestión financiera que compromete sus pagos quincenales, indicó que, por ahora, se realizan ajustes en las operaciones y gastos cotidianos de la universidad con el fin de reunir lo necesario, aunque subrayó que no existe un recurso extraordinario asignado para este fin.
Tal como ha sucedido años atrás, la UNACAR mantiene gestiones ante los gobiernos estatal y federal en busca de apoyos extraordinarios que permitan cubrir los compromisos de cierre de año, para los que no hay presupuesto, ni fondos de ningún tipo. Sin embargo, insistió en que el problema de fondo radica en la necesidad de una reforma estructural en el sistema de jubilaciones y pensiones del contrato colectivo, la cual se ha visto retrasada por controversias sindicales.

“Estamos viendo la manera de tener otras economías para asegurar el cierre del año, hay que aclarar que lo que se reúne a raíz de las contrataciones signadas por parte de trabajadores y por la parte patronal, son insuficientes para pagar todo lo que tenemos, estamos sacrificando operaciones, gastos, para asegurar el pago, vamos a ver hasta cuánto se puede, espero poder cerrar el año pagando, pero todavía faltan muchas gestiones”, dijo.
Laffón Leal dijo que están haciendo cálculos, pero el recurso extraordinario no lo hay, ojalá les den alguna ayuda, lo mismo con el Gobierno del Estado, porque las cuentas indican que se necesitan 20 millones de pesos, aun y cuando se hace uso eficiente del recurso, no pueden sacrificar todas las operaciones de la UNACAR para los jubilados.

Reconoció que la situación financiera de la UNACAR es complicada, pues aunque se ha administrado con eficiencia el subsidio federal y estatal, se han tenido que destinar ahorros para sostener el pago a jubilados, lo que limita el margen para el desarrollo de operaciones y proyectos institucionales.
Finalmente señaló que para este problema que año con año se presenta y que afecta a los jubilados, es indispensable la reforma estructural en la parte de jubilaciones y pensiones en el contrato colectivo, lo que depende de la base y del Sindicato, pero con la controversia interna, ha retrasado este asunto.
JGH