Elon Musk, director ejecutivo de Tesla y SpaceX, ha criticado abiertamente a Peter Navarro, principal asesor comercial del presidente Donald Trump, calificándolo de "imbécil" y "tonto de remate".
Esta reacción surge después de que Navarro desestimara a Tesla como un mero "ensamblador" que depende de piezas importadas, especialmente de Asia.
Navarro, en una entrevista con CNBC, señaló que Musk "no es un fabricante de automóviles", sino un "ensamblador" que trabaja con componentes extranjeros.
Añadió que la administración Trump busca que se fabriquen más componentes, como neumáticos y motores, en Estados Unidos.
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Musk respondió en su plataforma social X, defendiendo que Tesla es el fabricante de automóviles con mayor contenido estadounidense. Citando un estudio de Cars.com, destacó que cuatro modelos de Tesla se encuentran entre los cinco primeros en el ranking de vehículos "hechos en América".
Este enfrentamiento se produce en medio de la imposición de aranceles por parte de la administración Trump, que han generado volatilidad en los mercados y afectado a empresas como Tesla.
Musk ha abogado por un sistema de comercio sin aranceles entre Estados Unidos y Europa, mientras que Navarro defiende una política proteccionista para fortalecer la manufactura nacional.
Además, se ha revelado que Navarro ha citado en sus libros a un experto ficticio llamado "Ron Vara", un anagrama de su propio nombre, para respaldar sus argumentos económicos.
Esta práctica ha generado críticas sobre la credibilidad de sus afirmaciones y su influencia en las políticas comerciales de la administración.
La disputa entre Musk y Navarro refleja las tensiones internas en la administración Trump respecto a las políticas comerciales y la dirección económica del país.
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