Un violento tiroteo ocurrido la noche del miércoles frente al Museo Judío de Washington D.C. dejó como saldo dos empleados de la Embajada de Israel asesinados, informó el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, confirmó vía redes sociales que se está llevando a cabo una investigación activa.
“Estamos trabajando para obtener más información que compartir. Este acto carece de sentido y será tratado con toda la severidad que amerita”, escribió.
El ataque ocurrió muy cerca de la oficina local del FBI, lo que intensificó la atención de las autoridades.
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De acuerdo con medios locales como NBC, el presunto agresor habría gritado “Palestina libre” al momento de ser detenido, lo que ha generado sospechas sobre un posible móvil antisemita o político.
Uno de los empleados fue trasladado inicialmente en estado crítico a un hospital cercano, aunque más tarde se confirmó su fallecimiento junto con otra víctima en el lugar.
El embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, calificó el atentado como “un acto de terrorismo antisemita” y exigió acciones inmediatas por parte del gobierno estadounidense. “Hacer daño a la comunidad judía es cruzar una línea roja”, advirtió.
La Fiscal General de Estados Unidos, Pam Bondi, se trasladó al lugar junto con la fiscal federal adjunta, Jeanine Ferris Pirro, para supervisar el operativo y apoyar en las indagatorias.
Mientras tanto, el Comité Judío Americano (AJC), que organizaba un evento en el museo al momento del ataque, expresó su consternación y exigió justicia. “Estamos devastados. Nuestros corazones están con las víctimas y sus familias”, declaró su director ejecutivo, Ted Deutch.
IO
