Por segunda vez en una semana, reclusos identificados como miembros de la Mara Salvatrucha iniciaron este viernes dos motines simultáneos en Guatemala, manteniendo como rehenes a al menos nueve guardias penitenciarios.
De acuerdo con declaraciones del viceministro de Seguridad, José Portillo, a The Associated Press, los disturbios se registraron en la prisión de El Boquerón, ubicada en el departamento de Santa Rosa, y en Pavoncito, en la Ciudad de Guatemala.
Los internos exigen que sus líderes, trasladados a finales de julio a otros centros penitenciarios y puestos en aislamiento, sean devueltos a las cárceles originales. El cambio de ubicación se debió a pugnas internas que han dejado varias muertes.
Un antecedente reciente de violencia
El pasado martes, la misma estructura criminal protagonizó motines en los penales Preventivo y Fraijanes, donde retuvieron a 11 guardias durante 18 horas.
En esa ocasión, un operativo del comando antisecuestros de la Policía Nacional Civil logró liberar a los retenidos, detener a cinco pandilleros e incautar armas de fuego.
Las autoridades guatemaltecas mantienen vigilancia y unidades de emergencia en prevención ante un posible agravamiento de la situación.
La Mara Salvatrucha bajo la lupa internacional
Los reclusos involucrados cumplen condenas por delitos como asesinato, sicariato, violación y extorsión.
Este año, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró a la Mara Salvatrucha como organización terrorista, incluyéndola en un listado de grupos del crimen organizado que amenazan la seguridad regional.
Las autoridades continúan negociaciones para liberar a los guardias y restablecer el control total en ambas cárceles.
IO
