En su rueda de prensa matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo precisó el calendario y el alcance de las Farmacias del Bienestar, proyecto que complementará a la Megafarmacia inaugurada en 2023.
A partir de agosto de 2025 se instalarán cinco mil anaqueles dentro de las antiguas Tiendas Diconsa —hoy Tiendas del Bienestar— ubicadas en localidades rurales alejadas de clínicas.
De forma paralela, se habilitarán al menos 10 mil módulos adicionales afuera de los centros de salud de IMSS-Bienestar, ISSSTE y Secretaría de Salud, con lo que la red inicial sumará 15 mil puntos de entrega.
La mandataria explicó que el surtido estará enfocado en el programa “Salud casa por casa”: medicamentos para diabetes, hipertensión, dislipidemias, asma y otras enfermedades crónicas que las brigadas de enfermería monitorean en el domicilio de personas adultas mayores y con discapacidad.
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Cada receta llevará una etiqueta con el nombre del paciente para asegurar trazabilidad. El esquema aprovechará la cadena logística de Birmex, la paraestatal que ya opera la Megafarmacia del Bienestar en Huehuetoca, capaz de almacenar hasta 286 millones de piezas y despachar pedidos en 24-48 horas.
Sheinbaum destacó que la inversión proviene de la compra consolidada anual de medicamentos —presupuestada para 2025 y 2026—, por lo que los costos adicionales se limitan a anaqueles, señalética y conexiones de datos en los nuevos puntos de venta sin costo para el paciente.
El abasto de hospitales y clínicas continuará bajo los contratos vigentes, de modo que las Farmacias del Bienestar funcionarán como canal complementario para aliviar rezagos y reducir traslados.
El Gobierno prevé iniciar la cobertura en entidades con mayor dispersión poblacional —Chiapas, Oaxaca, Guerrero y la Sierra Tarahumara— y después escalar al resto del país.
Cada sucursal tendrá conectividad para registrar salidas en tiempo real y alertar sobre faltantes, mientras que en los módulos urbanos se integrará el servicio de toma de muestras de laboratorio ya anunciado en el Estado de México.
Con esta red, el Ejecutivo busca disminuir el gasto de bolsillo que, según la Encuesta Nacional de Salud 2024, todavía afecta al 42 por ciento de los hogares con enfermos crónicos. La meta oficial: que ningún paciente con diagnóstico de control camine más de 30 minutos para recibir su tratamiento mensual.
IO
