Quintana Roo registró mil 945 casos de enfermedades infecciosas intestinales durante la última semana, lo que representa un incremento del 21 por ciento respecto a los mil 607 registrados la semana anterior, de acuerdo con datos del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave).
Los padecimientos monitoreados incluyen diarreas virales, salmonelosis, amibiasis, giardiasis, intoxicaciones alimentarias y otras infecciones gastrointestinales, que suelen aumentar en temporada de calor debido a las condiciones ambientales propicias para la proliferación de virus, bacterias y parásitos.
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De acuerdo con el médico Luis López, las altas temperaturas aceleran la descomposición de los alimentos, sobre todo si no se almacenan de forma adecuada, algo que ocurre con frecuencia tanto en casa como en puestos de comida callejera.
“Durante el calor, la gente consume más alimentos fuera de casa, en la vía pública o en la playa, y muchas veces no se verifica la higiene con la que fueron preparados. También se incrementa el consumo de hielo o agua embotellada rellenada, que si no está purificada correctamente, puede representar un riesgo”, advirtió.
Aunque en la mayoría de los casos los síntomas son leves y se controlan con hidratación y reposo, López subrayó que cuando hay fiebre, vómitos constantes o diarrea intensa, existe riesgo de deshidratación severa, especialmente en niños, adultos mayores y personas con defensas bajas.
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El especialista indicó que estos repuntes son comunes entre junio y agosto, cuando las temperaturas alcanzan sus niveles más altos. Por ello, insistió en que la prevención debe reforzarse, aunque reconoció que muchas veces no se siguen las medidas básicas como lavar frutas y verduras, mantener los alimentos refrigerados o evitar productos de dudosa procedencia.
En ciudades turísticas como Cancún, Playa del Carmen y Tulum, el riesgo se multiplica debido al constante flujo de visitantes, el consumo de comida rápida en la calle y la venta de productos sin refrigeración adecuada. “Incluso el mal manejo del agua potable puede facilitar contagios y la presencia de bacterias en los alimentos”, añadió.
Ante este panorama, las autoridades sanitarias exhortan a la población a extremar precauciones y acudir al médico ante cualquier síntoma persistente, con el objetivo de evitar complicaciones que puedan poner en riesgo la salud.