Miles de bañistas se dieron cita ayer en las playas de Cancún para disfrutar del primer domingo de Semana Santa. Personas de distintas nacionalidades se congregaron en los arenales de la ciudad para aprovechar el inicio del periodo vacacional, bajo un clima caluroso que invitó a muchos a tomar el sol y refrescarse en el cálido mar azul de Cancún.
Las altas temperaturas no pasaron desapercibidas. De hecho, una mujer de origen extranjero sufrió una descompensación, aparentemente a causa de un golpe de calor.
Personal de la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat) intervino de inmediato para auxiliarla y, tras la llegada de paramédicos de una empresa particular, se determinó que no era necesario trasladarla a ninguna clínica. La mujer permaneció en la playa, acompañada por su pareja, quien estuvo pendiente de su estado de salud.
Durante un recorrido por la franja costera se constató una gran afluencia de visitantes, tanto turistas internacionales como nacionales. Las playas lucían repletas, con familias enteras disfrutando de la arena, el mar y el buen clima. En Playa Langosta, el ambiente era festivo y relajado; sin embargo, también se observaron situaciones que rompieron con la tranquilidad, como el caso de dos hombres que consumían un porro de marihuana a plena vista, sin que en ese momento intervinieran las autoridades.
A pesar de estos incidentes, el día transcurrió mayormente con tranquilidad. Las playas presentaban una imagen limpia y atractiva, con muy poco o casi nada de sargazo, lo que permitió a los visitantes disfrutar aún más del entorno. La mayoría aprovechó para nadar, tomar fotos, convivir en familia o simplemente relajarse bajo la sombra de una sombrilla.
En Playa Delfines, uno de los puntos más visitados, se escuchaba música y a personas conversando y riendo. Ahí, un turista de origen africano llamado Somos expresó con emoción que el lugar le parecía una muestra clara de la belleza del mundo. “Esta playa sólo me ha reafirmado que Dios es grande y hace cosas bellas”, dijo con una sonrisa, mientras contemplaba el arenal.
Así concluyó el primer domingo de Semana Santa en Cancún: con playas llenas, clima ideal y una mezcla de culturas que refrenda el papel de este destino como uno de los más importantes a nivel nacional e internacional para el turismo, permitiendo que familias locales y extranjeras disfruten de este paraíso.