Simón Benítez, padre de familia, denunció de manera pública la intoxicación de su hija de 14 años de edad en el Expofer de Chetumal, luego de que la fémina fuera drogada por “vía aérea” con el presunto uso de una sustancia parecida al fentanilo. De acuerdo con la declaración del progenitor, los hechos sucedieron cerca de las nueve de la noche del sábado pasado, en las inmediaciones del Expofer de Chetumal, situado en la calle Libramiento, con rumbo a las afueras de la ciudad. Simón Benítez relató que luego de dejar a su hija con demás familiares de la menor, estos estaban por ingresar a un juego mecánico.
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No obstante, de un momento al otro la menor de edad comenzó a presentar visión borrosa, dolor de cabeza, taquicardia, entumecimiento de extremidades, vómito y somnolencia, hecho que desconcertó a los presentes, puesto que hasta ese momento la joven no había consumido ningún producto del lugar: Mi teléfono sonó. Era mi hija, pero no era su voz normal. Era un murmullo entrecortado, una súplica silenciosa. Tenía un dolor de cabeza insoportable, comenzó a vomitar, sus manos y piernas se entumecían mientras su cuerpo se entregaba a una somnolencia inexplicable, relató el Simón Benítez.
Por tanto, la víctima fue trasladada hasta el Hospital General de Chetumal, donde fue internada en el área de urgencias. Luego de ser sometida a distintas pruebas de toxicología, la encargada de atender a la menor de edad reveló a los tutores que la joven presentaba síntomas de intoxicación por el consumo de fentanilo.
El diagnóstico desconcertó a los tutores de la menor, puesto que la fémina en ningún momento había estado al consumo de sustancias en su seno familiar, así como sus amistades tampoco eran acreedores de dicho hábito. En ese aspecto, la doctora señaló a los padres que la joven pudo haber sido “drogada” por vía aérea o contacto físico mientras se encontraba en el sitio.
Ante la falta de respuestas, Simón Benítez consideró esto como una maniobra de algún grupo delictivo dedicado a la sustracción de menores en el sur del estado, por lo que exhortó a la ciudadanía a tomar precauciones al momento de acudir al sitio:
“¿En qué clase de sociedad estamos viviendo, donde ni siquiera un espacio de entretenimiento familiar es seguro? No se trata de culpar a las autoridades, porque ya conocemos la historia de siempre, no saben, no pueden o peor aún, no quieren”. Pero yo no voy a permitir que esto se convierta en una estadística más, en un rumor que se olvida apenas termina la feria.” Finalmente, los tutores de la menor de edad subrayaron que esperan pronto realizar una denuncia de manera formal, con el fin de esclarecer los hechos.