La Agencia de Transporte de Yucatán (ATY), en coordinación con el área de Transporte Municipal, ha iniciado las inspecciones de las 15 unidades autorizadas para operar por cada una de las seis agrupaciones de taxis en Tizimín. En total, sólo se permitirá la circulación de 90 unidades con permiso vigente.
Como es de conocimiento público, en la Ciudad de Reyes el número de taxis pirata (que operan con números provisionales) supera los 200. Cerca del 50 por ciento de estos, según denuncias de otros gremios y sindicatos, pertenecen a Fénix, dirigida por Javier Briceño Pantí, sobrino de Luis Toraya Briceño, líder del grupo Toraya, la cual, aseguran, es la segunda con más unidades irregulares.
Ante esta situación, el sindicato Félix I. Rosado Iturralde, encabezado por Severo Avilez, alzó la voz y convocó a las demás agrupaciones para manifestarse. Lanzaron advertencias de que, si no se actuaba para regular la presencia de taxis pirata, cerrarían calles e incluso los accesos a la ciudad. Argumentaron que la competencia era desleal, ya que estos vehículos no pagaban los impuestos ni contaban con los permisos que exige la ley a los formales.
Fue por ello que la Agencia de Transporte de Yucatán (ATY) puso manos a la obra y, desde el pasado viernes, comenzó la inspección de las unidades de cada agrupación o sindicato que aspiran a formar parte del padrón oficial de 15 vehículos con permiso vigente por grupo. Las revisiones se están llevando a cabo en las instalaciones de la ATY, ubicadas en la calle 38 entre 59 y 61 de la colonia Santa Cruz.
La inspección incluye, entre otros aspectos: que el taxi cuente con seguro de cobertura amplia; que todas las luces funcionen correctamente; que el sistema de frenos esté en óptimas condiciones; que las llantas estén en buen estado; que el motor opere adecuadamente; que el vehículo tenga un botiquín de primeros auxilios con productos no caducados; y que todos los cinturones de seguridad sean funcionales.
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Adicionalmente, se verifica que el número de motor y la carrocería coincidan con la factura y el modelo del vehículo. Estos datos, junto con la placa actual, quedarán registrados en los nuevos permisos para evitar su transferencia a otras unidades. Con estas medidas, se busca garantizar no sólo la comodidad del usuario, sino también su seguridad, que es la prioridad.
Las inspecciones concluirán este viernes. A partir de esa fecha, toda unidad que circule con un permiso provisional vencido será detenida y trasladada al corralón municipal, quedando a disposición de las autoridades correspondientes.
Los operativos estarán a cargo de la ATY, el Transporte Municipal y posiblemente con el apoyo de corporaciones policiacas.
