Una encuesta realizada a nivel nacional, revela que la población campechana no está de acuerdo con las medidas que el alcalde Eliseo Fernández Montúfar ha implementado para combatir la propagación del nuevo Coronavirus COVID-19.
Según la encuestadora Caudae, el munícipe se encuentra por debajo de la media nacional, ya que Campeche ha puesto en tela de juicio el accionar de las políticas públicas que se efectúan en cada municipio. En esta lista dada a conocer por la empresa Caudae, especializada en estrategias políticas y posicionamiento de proyectos exitosos, detalla que los campechanos no aceptan las acciones implementadas por Fernández Montufar durante la contingencia.
En la encuesta de presidentes municipales COVID-19 del mes de abril del 2020, se le preguntó a la ciudadanía si consideraba que el alcalde estaba tomando las decisiones adecuadas para prevenir los efectos del coronavirus; sin embargo, las respuestas no favorecieron a Eliseo, por lo que, de 55 lugares, el munícipe campechano ocupa el lugar 32.
El primer lugar lo ocupa Manolo Jiménez, alcalde de Saltillo, mientras que en el segundo se encuentra Pablo Lemus de Zapopan. El mal llamado súper alcalde se ubica en el lugar 32 de los 55 lugares, es decir, no llega ni a la media de la encuesta, pues se localiza 5 puntos debajo de ésta.
Y es que desde el anuncio del primer caso el alcalde, lejos de informar y llamar a la calma, se dedicó a alarmar con publicaciones, donde según él, daba a conocer que en Campeche existían malas condiciones de salud, así como casos positivos que la misma dependencia no quería externar y que por tanto, muchas personas serían infectadas para luego perder la vida, hecho que por fortuna no ha ocurrido.
Días después, envió a cerrar los establecimientos que eran de la competencia municipal atender y posteriormente envió un mensaje de advertencia a la población donde alarmaba más de lo que realmente se debía.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) las políticas de seguridad en salud se deben establecer en cada etapa de la epidemia tomando en cuenta el número de casos positivos y la forma en que éstos se han contagiado, es decir, si son casos exportados o de propagación comunitaria.
Hace apenas unos días, se pudo percibir a una camioneta de la Dirección de Protección Civil Municipal, con una bocina instalada en el techo donde se escuchaba un mensaje grabado por el propio alcalde, donde de manera muy arrogante regaña a la ciudadanía y le exige que se queden en sus hogares. El mensaje es claro, quiere ser el mandamás.
La población campechana terminó de enojarse cuando, por medio de una transmisión en vivo en Facebook y de manera oportunista, exigió a las autoridades sanitarias para que cancelaran la venta de alcohol, como seña de “preocupación” por la economía de la ciudadanía; sin embargo, en aquella ocasión algunos ciudadanos externaron su descontento al afirmar que Eliseo no es quién para decir en qué deben invertir o gastar su dinero.
Tal parece que las medidas mal planeadas por parte del alcalde no cumplieron con su cometido principal y por el contrario ha ocasionado que la aceptación baje cada día más.
(Jorge Chan)