Desde la imponente Mezquita Sheikh Zayed en Abu Dhabi, una mujer campechana causó admiración al lucir un huipil artesanal bordado en el poblado de Dzibalché, Campeche, como parte de una muestra de identidad y orgullo cultural que traspasa fronteras.
La prenda fue elaborada por las manos talentosas de las artesanas Marbella Tun Chan y Silvia Cauich Chi, del taller Bordados Huntsdzitbalche, una agrupación que preserva y difunde el arte textil tradicional del municipio de Calkiní.
El momento fue compartido en redes sociales, donde la imagen de la campechana frente a una de las mezquitas más bellas del mundo, portando el colorido y detallado bordado campechano, se volvió un símbolo de conexión entre culturas y de visibilidad internacional para el arte indígena mexicano.
Este gesto representa no solo una muestra de elegancia y respeto por la tradición, sino también una plataforma para promover el trabajo de las mujeres artesanas, quienes con hilos y aguja continúan dando vida a las raíces mayas a través de prendas únicas.
El huipil, realizado con técnicas ancestrales y motivos florales característicos de la región, demuestra la riqueza cultural de Campeche, que ahora se aprecia en uno de los lugares más emblemáticos del mundo árabe.
Desde Dzibalché hasta Abu Dhabi, el arte textil campechano sigue conquistando corazones y mostrando que la moda también puede ser una herramienta de resistencia, identidad y orgullo.
JY
