
El Papa Francisco dejó una herencia de fe, que debe servir para la Iglesia Diocesana de Campeche como un ejemplo para seguir caminando y dar testimonio del evangelio, señaló el Padre Luis Mendoza, Vocero de la Diócesis de Campeche.
Señaló que la Iglesia Diocesana se une al luto de la Iglesia Universal por el fallecimiento del Papa Francisco, quien partió a la casa del Padre en medio de las fiestas pascuales de este año.
“Damos gracias a Dios por su vida, testimonio de fe, humildad, entrega a los pobres. Por haber guiado a la Iglesia con fraternidad en tiempos desafiantes”, comentó.
Agregó que el Papa Francisco fue un signo vivo del evangelio, una voz cercana, una voz profética, quien deja una profunda huella en los corazones y una herencia de fe que nos deja para seguir caminando.