Arrancaron los trabajos de la segunda etapa para la reconstrucción del techo en la parroquia de San Luis Obispo de Calkiní, donde los obreros realizan la demolición de lo que quedó del techo bajo fuertes medidas de seguridad, debido al riesgo de otro desplome.
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Al respecto, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) detalló que se ha contratado a personal especializado para estas labores, ya que se trata de un proyecto que requiere especial cuidado por tratarse de un inmueble histórico.
Por su parte, los alarifes de la CTM siguen a la espera de ser contratados para evitar conflictos. Señalan que no desean atrasos en los trabajos, pero están firmes en su demanda de una fuente de empleo y exigirán que se les tome en cuenta.
Los trabajos iniciaron ayer con la colocación de un andamio bajo el campanario, para comenzar a bajar los escombros del techo. Posteriormente, se procederá a realizar el colado del nuevo techo.
Destaca que la demolición del techo representa un proceso delicado, que debe realizarse tras un análisis estructural previo, pero es necesario para garantizar que la nueva estructura sea segura y durable.
JGH
