
A más de 35 años de estar viviendo en su domicilio y a más de un año de estar en pleito el terreno que le fue heredado por su difunta madre, hoy doña Paulina Pech García vio violentados sus derechos al llegar la actuaria y dos licenciados para ejecutar una orden de desalojo sin la previa notificación por parte del juzgado, según dio a conocer la afectada, quien dijo que no va a salir del predio del que es legítima propietaria.

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Los hechos ocurrieron al mediodía de ayer sobre la calle 22 entre 22ª y 29 del barrio de Kilakán, donde el problema lleva ya más de un año, hasta que, según se dijo, pudo más el dinero que la verdadera justicia. Incluso los vecinos dieron a conocer que doña Paulina tiene tiempo viviendo en dicho lugar, donde vivía su progenitora, quien al fallecer fue costeada por ella, mientras que quienes hoy pelean el terreno no hicieron presencia ni cuando se enfermó la madre.
Doña Paola narró que dicho predio, para evitar problemas, se lo compró a su hermana Lidia del Socorro Pech García y a Javier Arturo Aké May. Sin embargo, con el paso de los años, estos con documentos falsos lo volvieron a vender a otra hermana, Rita Leonor Pech García, quien a través de un juicio comenzó los procesos para apoderarse del predio que ya había sido pagado.

Llegado el día del desalojo, con el apoyo de casi una docena de policías, llegaron al predio indicado y comenzaron a sacar las pertenencias de la doñita, quien pidió que entrara su propia hermana para que la sacara personalmente, ya que de lo contrario no iba a salir.
Tras finalizar el desalojo, todas las autoridades se retiraron dejando las pertenencias de doña Paulina en la calle, a merced de los delincuentes y de la lluvia. Por ello, dijo que si se pierde algo de sus pertenencias procederá contra los licenciados y la actuaria, quienes ordenaron el desalojo del predio sin ninguna orden emitida previamente, por lo que aseguró que nadie la va a sacar de su predio, ya que doña Paolita tiene su propio documento original, finalizó.
JGH