Una nueva experiencia relacionada con el llamado "mal aire" estremeció a los pobladores de la región, cuando un pintor local, identificado como Antonio Cob, fue encontrado desorientado y dando vueltas en bicicleta en la antigua carretera federal entre Tepakán y Bécal, durante la noche del domingo.
Según testigos, Floreció Ucán Duarte y José Cob, al notar el comportamiento inusual de Antonio, decidieron detenerse y preguntarle qué ocurría. El afectado, conocido en la comunidad como “Antoni”, confesó estar confundido y no saber cómo regresar a Tepakán, pese a encontrarse a pocos metros del entronque.
Los testigos afirmaron que la situación les dio un “escalofrío” al recordar las advertencias de una sacerdotisa maya, quien había mencionado que los aluxes —entidades del imaginario maya— estaban molestos por la constante invasión a sus tierras, lo que habría provocado esta serie de fenómenos.
Con temor de que Antonio pudiera ser una nueva víctima de los terrenos encantados, como ocurrió con el artesano de escobas aún desaparecido, los dos hombres decidieron subirlo a un triciclo junto con su bicicleta y acompañarlo hasta su hogar, evitando así que se extraviara.
Desde aquel extravío, muchos habitantes han dejado de transitar por la ciclovía, sobre todo durante los horarios críticos: 12 del mediodía, 6 de la tarde y 12 de la medianoche, considerados por los lugareños como los momentos en que el “mal aire” ataca con más fuerza, sobre todo a personas de la tercera edad.
Finalmente, los pobladores hicieron un llamado a la precaución, especialmente a los familiares de adultos mayores, para evitar cruzar solos por la zona durante esas horas, y reiteraron su creencia de que “el mal aire sí existe y puede llevarse a quien no esté preparado”.
