La Alianza Mexicana de Organización de Transportistas (AMOTAC) en Campeche solicitó, durante las recientes mesas interinstitucionales con la Secretaría de Gobernación, que se investigue y frene a los responsables de los bloqueos carreteros registrados en la Península de Atasta, los cuales —señalan— están afectando seriamente a los sectores productivos y logísticos de la región.
Noticia Destacada
"Vive en otro mundo"; comerciantes de Carmen arremeten contra Dalila Mata por abuso de poder
Jesús Fernando Solís Montañez, representante de AMOTAC en el estado, advirtió que aunque el cierre de carreteras ya no se considera delito, estos actos han derivado en prácticas que van desde el cobro de cuotas hasta el robo de mercancías, particularmente en unidades que transportan productos perecederos, generando así severas pérdidas económicas, desesperación y rechazo de terceros perjudicados con problemas que, por más empáticos que sean, no pueden resolver.
Pese a que desde abril existe un acuerdo con las autoridades estatales de que no habrá más bloqueos, tras el histórico de más de 48 horas, algún pequeño grupo lo ha hecho en al menos dos ocasiones más, entonces consideran que, por más pactos y vigilancia, hay quien está detrás de estas acciones arbitrarias, y la muestra es cómo en el perifoneo de las comunidades, como es el caso de Nuevo Progreso, ellos mismos difunden esos cierres.
“El problema es que si llegas con fruta o verdura y te estacionan, ya no puedes salir, por las enormes filas que se forman en cuestión de minutos. Lo que traes de carga, al ser perecedero, se echa a perder. Hay rapiña. Las combis que van a Dos Bocas tienen su ‘pasadizo’, pero tienen que pagar una ‘cuotita’ para que las dejen pasar”, declaró.
Según el dirigente transportista, hay un grupo de pobladores que estaría detrás de estos bloqueos, los cuales —más allá de una legítima protesta social— estarían siendo usados con fines lucrativos y de presión indebida. “Ya cualquiera se organiza, bloquea y cobra. Los que pagan, pasan. Si pueden robar algo, también lo hacen”, añadió.
Solís Montañez reconoció que algunas demandas de las comunidades pueden ser válidas, como los reclamos por apagones o falta de atención gubernamental. Sin embargo, cuestionó que los cierres carreteros se usen como única vía de presión. “No se vale que lo tomen como bandera para todo. Que se atiendan sus necesidades, sí, pero no que afecten a miles”, dijo.
El dirigente de AMOTAC instó a las autoridades a identificar a los responsables de estos paros y citarlos para rendir cuentas. “Que los citen y vean si son tan valientes. Ya después se les quita lo bravo. Ojalá que analicen el gran daño que ocasionan”, expresó.
Finalmente, señaló que ante la recurrencia de estas acciones, los transportistas han optado por crear redes de comunicación para alertarse y redirigir rutas, utilizando la vía federal 186 como alternativa cuando se reportan bloqueos en Atasta. El problema es que cuando en Tabasco también toman medidas, ya no hay paso hacia la Península de Yucatán.
JGH
