Elementos de la Dirección de Seguridad Pública municipal respondieron a un reporte ciudadano sobre un presunto intento de robo de un vehículo en un taller ubicado en la privada 53-B por 68. El automóvil en cuestión, un Volkswagen clásico de color blanco con placas de Yucatán, fue interceptado mientras era empujado por un sujeto desconocido, lo que llamó la atención de los vecinos, quienes alertaron a las autoridades.
Al llegar al lugar, los oficiales encontraron al hombre empujando el vehículo y procedieron a cuestionarlo. El individuo alegó ser el legítimo propietario del auto y explicó que desde hace seis meses ha estado exigiendo la entrega de su unidad, misma que dejó en el taller para trabajos de hojalatería y pintura. Según su testimonio, ha pagado más de $20,000 pesos por los servicios, pero hasta el momento no ha visto avances sustanciales ni ha recibido su automóvil completo.
El propietario también denunció que el vehículo presentaba faltantes de piezas, los trabajos contratados no estaban concluidos y que incluso se habían extraviado las llaves del mismo. Ante la falta de respuesta del taller, tomó la decisión de retirar su vehículo por su cuenta para trasladarlo con una grúa a otro establecimiento donde pudiera concluir la reparación.
Agentes municipales realizaron entrevistas con ambas partes para deslindar responsabilidades y verificar la autenticidad de los dichos. Tras la intervención, se permitió que el propietario del Volkswagen trasladara su vehículo con apoyo de una grúa a otra ubicación. El incidente generó momentos de tensión en la zona, pero fue resuelto sin mayores complicaciones gracias a la intervención oportuna de las autoridades.
JGH
