En un duelo cargado de intensidad y dramatismo, el Cruz Azul dio un paso importante hacia la final del Clausura 2025 al imponerse por la mínima diferencia ante el América en el partido de ida de las semifinales disputado en el Estadio Olímpico Universitario. El 1-0 conseguido por la escuadra celeste no solo representa una ventaja valiosa de cara a la vuelta, sino que además significó el fin de una impresionante racha del técnico azulcrema André Jardine, quien no conocía la derrota en Liguilla tras 17 partidos.
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El héroe y villano de la noche: Nacho Rivero
El encuentro, que enfrentó a los dos clubes más dominantes del fútbol mexicano en los últimos torneos, tuvo como protagonista al capitán celeste Ignacio Rivero. El uruguayo se convirtió en el héroe al minuto 59, cuando conectó un preciso cabezazo al centro del área tras un tiro de esquina ejecutado desde la banda izquierda, batiendo al guardameta Malagón y desatando la euforia entre la afición cementera.
Sin embargo, la alegría por su gol se transformaría en preocupación apenas siete minutos después. Al 66', Rivero cometió una fuerte entrada sobre Álvaro Fidalgo, impactando peligrosamente en el tobillo del español. Aunque el árbitro Luis Enrique Santander no señaló inicialmente la falta, el VAR lo llamó a revisar la jugada, tras lo cual no dudó en mostrarle la tarjeta roja directa al mediocampista uruguayo, dejando a su equipo con 10 hombres para el resto del encuentro.
Este incidente no solo complicó el desarrollo del partido para los celestes, sino que además significa que Rivero, pieza fundamental en el esquema de Vicente Sánchez, no estará disponible para el decisivo juego de vuelta en el Estadio Azteca.
Jardine también se despide del banquillo
La expulsión de Rivero desencadenó una serie de protestas por parte del cuerpo técnico americanista, particularmente del entrenador André Jardine, quien reclamó airadamente a la terna arbitral. La intensidad de sus reclamos provocó que Santander, conocido por su poca tolerancia a las protestas, le mostrara también la tarjeta roja al estratega brasileño.
Esta expulsión representa un duro golpe para las Águilas, ya que Jardine no podrá dirigir desde el banquillo en el partido de vuelta, precisamente cuando su equipo necesita remontar para mantener vivo el sueño del histórico Tetracampeonato.
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La ausencia del técnico brasileño es especialmente significativa si se considera que hasta este encuentro, Jardine había establecido una impresionante racha de 17 partidos sin perder en Liguilla, secuencia que le permitió conquistar el Tricampeonato con el cuadro azulcrema. ¿Será esta derrota un presagio del fin de la dinastía americanista?
La Máquina sigue imparable
Por su parte, el triunfo celeste extiende la extraordinaria racha de Cruz Azul, que alcanzó los 19 partidos consecutivos sin perder entre todas las competencias. Este registro no solo refleja la solidez del equipo dirigido por Vicente Sánchez, sino que también confirma las aspiraciones de la escuadra cementera, que sueña con conquistar tanto la Liga MX como la Concacaf Champions Cup en este semestre.
El partido no estuvo exento de polémica desde sus primeros minutos. Una aparente mano de Erik Lira dentro del área, tras un rodillazo de Cristian Borja a la pelota, generó reclamos por parte del América, pero el árbitro consideró que no era merecedora de un penalti.
Entre la cautela y la explosión
El desarrollo del encuentro estuvo marcado por la cautela táctica de ambos equipos durante la primera mitad, algo comprensible considerando que se trata de dos escuadras que se conocen a la perfección y que han protagonizado intensos duelos en fechas recientes. La repetición de enfrentamientos en lapsos cortos de tiempo y en instancias decisivas ha llevado a que cada uno sepa exactamente cómo anular al otro.
Sin embargo, el segundo tiempo trajo consigo un juego más abierto y emociones que finalmente acompañaron el fervor de las tribunas. Momentos antes del gol celeste Víctor Dávila estuvo cerca de anotar un tanto espectacular con un disparo desde un ángulo casi imposible que terminó estrellándose en el travesaño de la portería defendida por Malagón.
Con 10 hombres, a defender la ventaja
La expulsión de Rivero obligó a Vicente Sánchez a reajustar su planteamiento, sacrificando al polaco Mateusz Bogusz para dar entrada a Lorenzo Faravelli, buscando darle mayor equilibrio al mediocampo y resistir el previsible asedio americanista.
Por su parte, el América aprovechó la superioridad numérica para lanzarse en busca del empate. Jardine, antes de ser expulsado, realizó varios cambios ofensivos, ingresando a jugadores como Alejandro Zendejas (quien no se encontraba al 100% físicamente), Rodrigo Aguirre, Diego Valdés y Cristian "Chicote" Calderón
A pesar de la presión, Cruz Azul no renunció completamente al ataque, y Sánchez decidió dar entrada al griego Giorgos Giakoumakis en lugar de Ángel Sepúlveda al minuto 84, buscando mantener ocupada a la defensa americanista y evitar que el juego se inclinara completamente a favor de la visita.
América no encuentra el gol
Los minutos finales fueron de completo dominio americanista. Con dos delanteros como Henry Martín y Rodrigo "Búfalo" Aguirre, más el apoyo ofensivo de Zendejas y Calderón, las Águilas buscaron afanosamente el empate a base de centros y llegadas por las bandas.
Sin embargo, quedó en evidencia que ni Henry ni el charrúa Aguirre están en su mejor momento futbolístico, ambos apenas recuperándose de lesiones y sin el ritmo óptimo para esta fase decisiva del torneo. Además, la ausencia de un Zendejas al 100%, quien había sido figura clave en la eliminatoria ante Pachuca, mermó el potencial ofensivo azulcrema.
Todo se definirá en el Azteca
Cruz Azul logró mantener su portería en cero y se llevó una ventaja mínima pero valiosa de cara al partido de vuelta, que se disputará el próximo domingo en el Estadio Azteca. Si bien la ventaja es ajustada, representa un paso importante hacia la final para la escuadra cementera.
No obstante, sería un error subestimar al América, un equipo que ha demostrado su capacidad para sobreponerse a la adversidad y que tiene amplia experiencia en estas instancias. A pesar de la derrota y de la expulsión de su entrenador, el sueño del tetracampeonato sigue intacto para las Águilas, que buscarán revertir la situación en casa con el apoyo de su afición.
Lo que es seguro es que el próximo domingo, este nuevo "Clásico Nacional" escribirá un nuevo capítulo que quedará para siempre en la historia del fútbol mexicano, con un Cruz Azul buscando consolidar su gran momento y un América intentando demostrar por qué es el equipo más ganador del país.