La NFL fue testigo de un momento histórico que paradójicamente no quedará registrado en los libros oficiales. Cam Little, el joven kicker de 21 años de los Jacksonville Jaguars, protagonizó una patada épica de 70 yardas que habría superado el récord oficial de la liga, pero las reglas de pretemporada le negaron su lugar en la historia oficial del fútbol americano.
El momento que paralizó el EverBank Stadium
Durante el enfrentamiento entre Pittsburgh Steelers y Jacksonville Jaguars en el EverBank Stadium, justo antes del medio tiempo, Cam Little se preparó para intentar algo que parecía imposible. Con el reloj corriendo hacia el descanso, el kicker se posicionó para una patada de 70 yardas que desafiaría las leyes de la física y los récords de la NFL.
La patada atravesó los postes con autoridad, superando las 66 yardas que Justin Tucker estableció como récord oficial en 2021. El estadio estalló en celebración, consciente de haber presenciado algo verdaderamente especial, aunque destinado a permanecer en la memoria más que en los registros oficiales.
Las reglas que frustran la historia
Liam Coen, entrenador en jefe de Jacksonville, expresó la mezcla de orgullo y frustración que genera esta situación única: "Él quería intentarlo, así que se lo dimos. Fue algo genial para Cam. Uno desearía que eso fuera para los libros de récords".
Las regulaciones de la NFL son claras y estrictas: las estadísticas de pretemporada no se registran en los libros oficiales, sin importar cuán extraordinarias puedan ser. Esta política garantiza que solo las actuaciones en partidos que "cuentan" oficialmente sean consideradas para récords y reconocimientos históricos.
Cam Little no es un desconocido en el mundo del fútbol americano. Nacido en Moore, Oklahoma, el joven de 21 años es un pateador de segundo año que fue reclutado en la sexta ronda del Draft 2024 tras una sólida etapa universitaria con los Arkansas Razorbacks.
Su año de novato en la NFL demostró su calidad excepcional: acertó 27 de 29 intentos de gol de campo, con un máximo de 59 yardas, y no falló ninguno de sus 27 puntos extra. Además de sus habilidades como kicker, Little se desempeña como especialista en kickoffs, logrando 65 touchbacks en 76 patadas durante la temporada 2024.
Mientras la patada histórica de Little acaparaba la atención mediática, el partido entre Steelers y Jaguars terminó con victoria de Pittsburgh por 31-25, ofreciendo un vistazo valioso a las piezas con las que ambos equipos planean encarar la temporada 2025.
Por el lado de Pittsburgh, Mason Rudolph abrió el juego con gran precisión, completando 9 de 10 pases para 84 yardas y un pase de touchdown dirigido al ala cerrada Darnell Washington. En la segunda mitad, Skylar Thompson tomó el control de la ofensiva acerera, sumando 233 yardas por aire y tres anotaciones.
En Jacksonville, la atención también se centró en el novato Travis Hunter, segunda selección global del Draft 2025 y reciente ganador del Trofeo Heisman. Hunter, que llegó a la liga con la etiqueta de fenómeno de dos vías, jugó tanto en ofensiva como en defensiva.
Como receptor, atrapó dos pases para 9 yardas, mientras que como esquinero mostró destellos de la habilidad que lo convirtió en una de las mayores promesas del año.
La patada de Cam Little plantea una pregunta fascinante sobre la naturaleza de los récords deportivos. ¿Puede considerarse un récord algo que técnicamente superó todas las marcas anteriores pero no será reconocido oficialmente?
Para efectos prácticos, Justin Tucker mantiene el récord oficial de 66 yardas, pero en el corazón de quienes presenciaron la patada de Little, existe la certeza de haber visto algo verdaderamente excepcional.
Independientemente de si su patada queda registrada oficialmente, Cam Little ha demostrado que posee un talento extraordinario que podría llevarlo a establecer récords oficiales durante la temporada regular. Su precisión, potencia y consistencia lo posicionan como uno de los kickers más prometedores de la nueva generación.
La pretemporada 2025 continuará ofreciendo momentos emocionantes mientras los equipos se preparan para la campaña oficial, pero pocos serán tan memorables como la patada de 70 yardas que rompió un récord sin romperlo oficialmente.