Durante una conferencia de prensa en Varsovia, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, emitió una severa advertencia a Rusia, indicando que cualquier ataque contra Polonia o cualquier otro miembro de la alianza sería enfrentado con una respuesta devastadora.
Acompañado por el primer ministro polaco, Donald Tusk, Rutte subrayó la fortaleza y unidad de la OTAN ante posibles agresiones externas.
Rutte destacó que Rusia sigue representando la amenaza más significativa para la alianza y señaló que Moscú está transformando su economía en una de guerra, lo que podría influir en su capacidad militar futura.
Estas declaraciones surgen en un contexto donde Polonia y los países bálticos han incrementado su gasto en defensa y reforzado sus maniobras militares desde la invasión rusa a Ucrania en 2022, mostrando preocupación por posibles acciones similares en su contra.
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El primer ministro Tusk expresó la importancia de estar preparados para diversos escenarios, reconociendo que la influencia en las negociaciones actuales es limitada.
La visita de Rutte a Varsovia coincide con esfuerzos diplomáticos de Estados Unidos para resolver el conflicto en Ucrania, en los cuales los países europeos buscan tener un rol más activo.
La OTAN reafirma así su compromiso con la defensa colectiva, enviando un mensaje claro a Moscú sobre las consecuencias de cualquier agresión hacia sus estados miembros.
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