El funeral del papa Francisco se celebrará el próximo viernes 26 de abril a las 10:00 horas locales (8:00 GMT) en la Plaza de San Pedro, en una ceremonia que reunirá a jefes de Estado y representantes de gobiernos de todo el mundo, según anunció este martes la Santa Sede.
La liturgia fúnebre será presidida por el decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re.
Previo al sepelio, el miércoles 24 de abril, el cuerpo del pontífice argentino será trasladado desde la capilla de la Casa Santa Marta hasta la Basílica Vaticana para que los fieles puedan rendirle homenaje.
El rito de “traslación” será presidido por el camarlengo, el cardenal Kevin Joseph Farrell, e incluirá una procesión solemne a través de la Plaza Santa Marta y la Plaza de los Protomártires Romanos, antes de ingresar por la puerta central de San Pedro.
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En el Altar de la Confesión, bajo el baldaquino de Bernini, se celebrará una Liturgia de la Palabra, tras la cual se permitirá la visita del público.
Aunque aún no se ha definido el tiempo de exposición, se confirmó que el cuerpo de Francisco, conforme a sus deseos, se mostrará en un féretro abierto de madera con interior de zinc, sin catafalco ni báculo papal.
Una vez finalizada la misa fúnebre, el féretro será llevado a la Basílica de Santa María la Mayor, como el propio Francisco estipuló en su testamento fechado en 2022.
Allí descansará en un sepulcro sencillo, sin ornamentación y con la inscripción: “Franciscus”, ubicado entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza, dos espacios de alto valor simbólico para el pontífice.
Este funeral marca un cierre solemne y austero, tal como lo pidió el primer papa latinoamericano, cuya vida y legado espiritual seguirán vivos en el corazón de millones de fieles.
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