La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, expresó que la llamada “Ley Esposa”, recientemente aprobada por el Congreso de San Luis Potosí, no es necesaria para garantizar la paridad de género en los procesos electorales.
Durante la conferencia matutina desde Palacio Nacional, la mandataria sostuvo que el principio de igualdad entre mujeres y hombres en las candidaturas ya se cumple con los acuerdos del Instituto Nacional Electoral (INE), sin requerir nuevas disposiciones locales de alternancia obligatoria.
Sheinbaum explicó que el ministro en retiro Arturo Zaldívar, coordinador general de Política y Gobierno de la Presidencia, revisa la constitucionalidad de esta reforma electoral estatal, y adelantó que el análisis será presentado públicamente.
Más allá del debate jurídico, la Presidenta subrayó que legislar la alternancia rígida —hombre, mujer, hombre, mujer— no resulta indispensable si los partidos ya están obligados a postular 50 por ciento de candidaturas encabezadas por mujeres.
Paridad de género y acuerdos del INE
La titular del Ejecutivo destacó que el acuerdo del INE, que deberá consolidarse en una reforma electoral, ha permitido avances tangibles en la representación política de las mujeres, incluida la llegada de más gobernadoras.
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A su juicio, este esquema, complementado con acciones afirmativas, es suficiente para garantizar la igualdad sustantiva en la competencia electoral.
“Con las reglas actuales se cumple el objetivo de paridad”, enfatizó Sheinbaum, al señalar que imponer nuevas leyes podría no aportar beneficios adicionales y, en algunos casos, generar efectos contraproducentes.
¿Es necesaria la alternancia obligatoria?
Desde el Salón Tesorería, la Presidenta insistió en que no ve indispensable legislar la alternancia estricta para evitar exclusiones, ya que el marco vigente protege la participación de mujeres y hombres.
Aun así, reiteró que su gobierno esperará el análisis constitucional para fijar una postura definitiva.
Sheinbaum recordó que días antes había advertido que este tipo de reformas “no necesariamente ayudan a las mujeres”, por lo que llamó a los congresos estatales a evaluar con cuidado sus alcances, considerando pros y contras.
Representación femenina y resultados
Finalmente, la mandataria resaltó el desempeño de las mujeres en cargos ejecutivos y de gobierno, y sostuvo que los avances logrados difícilmente se habrían dado sin las reglas de paridad impulsadas desde el ámbito electoral nacional.
En ese sentido, reafirmó su postura: fortalecer lo que ya funciona, antes que multiplicar leyes que podrían resultar redundantes.
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