El alcalde de Matamoros, Tamaulipas, Alberto Granados, negó categóricamente este viernes haber sido detenido en la frontera con Estados Unidos, como reportaron previamente diversos medios.
Según su versión, únicamente fue sometido a una revisión migratoria de rutina, como cualquier otro ciudadano.
“Fue solamente una revisión cotidiana, como a cualquier persona le puede tocar”, expresó Granados en declaraciones a la prensa, luego de que surgieran versiones sobre una supuesta detención en el cruce fronterizo de Brownsville, Texas, la tarde del jueves.
Reportes iniciales indicaban que el edil había sido retenido para un interrogatorio prolongado, en el que presuntamente participaron agentes del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. (DHS), la DEA y el FBI.
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No obstante, el propio alcalde minimizó el hecho al atribuir la atención mediática a su cargo público.
“Por ser el alcalde y haber tomado una foto, se hace un poquito más de ruido, pero fue una revisión cotidiana”, insistió.
También descartó que las autoridades estadounidenses le hayan retirado la visa, subrayando que puede ingresar sin inconvenientes al país vecino: “Claro que sí puedo entrar”.
La aclaración se da en un contexto político sensible en la región fronteriza, donde las revisiones migratorias se han intensificado en medio de operativos de seguridad transfronterizos y crecientes tensiones diplomáticas entre ambos países.
IO
