La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina, acudió la noche del martes al velorio de sus colaboradores cercanos, Ximena Guzmán Cuevas y José Muñoz, asesinados la mañana del mismo día en un ataque directo sobre Calzada de Tlalpan, en la colonia Moderna.
El servicio fúnebre se realizó en la funeraria Gayosso de la calle Sullivan, donde Brugada llegó en punto de las 21:00 horas, acompañada por Ernestina Godoy, consejera jurídica del Poder Ejecutivo.
La presencia de la mandataria capitalina reflejó el profundo pesar que ha causado el crimen dentro de su administración.
El recinto fue resguardado por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, la Guardia Nacional y la Marina, quienes aseguraron los alrededores y gestionaron el tránsito vehicular.
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Diversos integrantes del gabinete capitalino llegaron antes del ingreso de Brugada, entre ellos Inti Muñoz Santini, Raúl Basulto, Araceli Damián y Tomás Pliego.
También acudieron legisladores y alcaldes de varias demarcaciones, como Circe Camacho (Xochimilco), Gabriela Osorio (Tlalpan), Luis Mendoza (Benito Juárez) y Lourdes Paz (Iztacalco).
Desde el Congreso local, la diputada Martha Ávila expresó: “No vamos a permitir que este crimen nos fracture. Quisieron generar una crisis, pero nos mantendremos firmes”.
A la ceremonia también asistieron funcionarias federales como Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación, y Citlalli Hernández, secretaria de las Mujeres, mostrando solidaridad institucional ante la tragedia.
Clara Brugada no ofreció declaraciones a su llegada. Tras saludar brevemente a miembros de la Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata, ingresó al recinto para rendir homenaje a quienes definió como pilares de su proyecto político.
IO
