Por tercera ocasión en menos de una semana, integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) regresaron este jueves a la avenida Bucareli para presionar la mesa con la Comisión Nacional Única de Negociación (CNUN) y funcionarios de la Secretaría de Gobernación (Segob) y de Educación Pública (SEP).
La jornada derivó en un enfrentamiento con un grupo de encapuchados que intentó replegar a los manifestantes y lanzó objetos contundentes —palos y piedras, según primeros reportes— provocando momentos de caos y tensión.
Elementos de la Policía de la Ciudad de México formaron un cerco para evitar que la trifulca escalara y, hasta el momento, no se reportan detenciones ni heridos de gravedad; sin embargo, ambulancias de ERUM atendieron a cuatro personas con golpes menores y crisis nerviosas.
La Segob mantuvo la reunión a puerta cerrada pese al altercado.
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Contexto de la protesta
La CNTE lleva más de 18 días de plantón y bloqueos en la capital. Exige, entre otros puntos, la derogación de la reforma a la Ley del ISSSTE de 2007, un aumento salarial del 100 poor ciento y la desaparición de la USICAMM.
Las negociaciones han sido infructuosas: la última ronda terminó sin acuerdos y el sindicato aplazó la consulta con sus bases para definir un plan de acción.
Mientras la mesa sesionaba, los docentes bloquearon nuevamente Paseo de la Reforma, Insurgentes y Circuito Interior, afectando a miles de automovilistas y al transporte público.
La Segob ha ofrecido congelar la edad de jubilación y crear un grupo interdisciplinario que revise el sistema de pensiones, propuestas que la Coordinadora considera insuficientes.
Próximos pasos
Voceros de la CNTE adelantaron que, de no registrarse avances “sustanciales” hoy, evaluarán reforzar el plantón con contingentes de Oaxaca y Chiapas y realizar marchas simultáneas en al menos ocho estados.
La Segob, por su parte, reiteró que mantendrá el diálogo abierto y descartó recurrir a la fuerza pública para desalojar las protestas.
La Secretaría de Seguridad capitalina llamó a la ciudadanía a evitar la zona de Bucareli y buscar rutas alternas mientras continúan las negociaciones.
IO
