Cientos de personas se formaron este jueves en las inmediaciones del Parque de las Palapas para comprar pan en la nueva sucursal de la panadería Chiapas, que abrió sus puertas luego de denunciar un presunto caso de extorsión. La fila comenzó desde las cinco de la tarde y perduró hasta la noche.
El establecimiento, ahora en el corazón del centro de Cancún, llega después de que su anterior sede, ubicada en el fraccionamiento Las Palmas, estuviera a punto de cerrar tras un caso de extorsión.
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La situación se dio a conocer en redes sociales y provocó una gran ola de apoyo hacia Doña Mary, encargada del local y figura reconocida entre los clientes habituales.
Aunque inicialmente se había despedido de su clientela, a quienes llama nietos, el caso cobró notoriedad y permitió mantener activo el negocio, ahora con esta nueva ubicación. La reapertura marca una nueva etapa para la panadería, que volvió a operar con alta demanda por parte de la comunidad.
