Un masculino de 47 años de edad resultó policontundido y con diversas escoriaciones en brazos, piernas y rostro, tras derrapar de manera brusca cuando se encontraba a bordo de una motocicleta sobre el Kilómetro 19, a la altura de Bacalar.
Los hechos se registraron cerca de las once y media de la noche, en la carretera Chetumal – Cancún. El agraviado fue identificado como Guillermo Enrique Ojeda Ayala, aparentemente originario de Chetumal. En ese sentido, los presentes señalaron que el motociclista venía transitando desde la salida de Chetumal con movimientos erráticos, mismos que llamó la atención de diversos conductores, pues, de acuerdo con estos, el motociclista solía cambiar de carril de manera irregular.
No obstante, al llegar al Kilómetro 19, un movimiento en falso lo hizo perder el control total de su unidad de dos ruedas, por lo que en cuestiones de segundos el agraviado ya se encontraba tendido boca abajo cerca del camellón central. Mientras que su unidad todavía avanzó algunos metros más hasta quedar entre la espesa vegetación de la guarnición.
El percance generó revuelo entre los demás conductores y presentes, quienes descendieron sus respectivas unidades para socorrer al afectado. Más tarde, al lugar de los hechos arribaron paramédicos del Grupo de Rescate Rino, comandado por el paramédico Humberto García. Los rescatistas brindaron atención de primeros auxilios al afectado, quien por la magnitud del golpe estaba casi inconsciente. El agraviado fue ingresado a la ambulancia RINO 03 mediante el uso de una camilla especial. Tras ser arduamente inspeccionado, los paramédicos descartaron cualquier herida de lesión o gravedad.
Asimismo, confirmaron la gran cantidad de alcohol en sus venas, hecho que habría provocado accidente. Por otro lado, la motocicleta, identificada como una Italika color modelo 125Z, resultó con daños significativos, sobre todo en la cúpula y en el manillar. Asimismo, elementos de la Guardia Nacional División Caminos (GN), también cooperaron en el operativo mediante la regulación del tráfico, con el fin de evitar que un percance similar se registre.
Por lo que tras el pasó de los minutos el tráfico regresó a la normalidad. Cabe destacar que el pasado 24 de septiembre un hecho similar se suscitó en la misma vialidad, cuando dos aparentes menores de edad terminaron con graves lesiones al circular sin casco de seguridad.
