
Luego de horas de suplicio para la familia del bebé que murió al interior de la clínica del Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS) de Chetumal, el personal médico finalmente le entregó el cuerpo del bebé que falleció por presunta negligencia médica, sin embargo, antes de que la familia por fin tuviera el cuerpo para darle sepultura, el hospital continuó poniendo trabas, como conseguir primero una funeraria donde velarlo.
De acuerdo con la información brindada por los familiares, quienes decidieron documentar lo ocurrido, pasaron cerca de cuatro días de calvario para que por fin pudieran tener en sus manos el cuerpo de la recién nacida, pues se dio a conocer que se trataba de una niña; quien en cuanto fue posible para la familia fue trasladada al cementerio “Campos del Recuerdo” para darle sepultura.
Los hechos iniciaron cuando Esmeralda, una joven de 18 años, acudió a la clínica del IMSS porque presentaba un dolor, sin embargo, el personal médico le aseguró que estaba teniendo una amenaza de aborto, por lo que terminaron por sacarle a la bebé, quien contaba con cinco meses de gestación, sin darles razón a los familiares de todo lo que estaba pasando hasta que les avisaron que la recién nacida murió.

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Sin embargo, cuando fue el momento de entregar el cadáver de la bebé, las enfermeras no lo encontraron y no sabían qué decirle a la abuela, quien fue a reconocer el cuerpo -pese a que nunca les mostraron a la recién nacida, sino nada más una bolsa donde supuestamente estaba-.
Más tarde, les comunicaron que el cadáver fue trasladado a la clínica de Playa del Carmen por equivocación, por lo que tendrían que esperar a que fuera regresada a Chetumal.

Finalmente, cuando el hospital le dijo a la familia que le entregarían el cuerpo de la recién nacida, exigieron que contaran con una funeraria para que pudieran entregárselos, por lo que la familia nuevamente se vio en una situación desfavorable ya que no contaban con los recursos para costear los gastos de la funeraria, toda vez que lo vivido era algo con lo que no contaban, por lo que tuvieron que acudir a las redes sociales para solicitar apoyo de la ciudadanía, que afortunadamente respondió de manera positiva.

Cabe mencionar que entre los familiares existe la sospecha de que el cuerpo que les entregaron no pertenece a la menor fallecida, debido al estado en que se encontraba, puesto que no parecía corresponder con el tiempo de muerte.