La muerte de un jaguar de ocho años en el parque zoológico La Reina de Tizimín puso a este espacio en el ojo del huracán, y más aún luego de que se filtraron fotografías de una leona que, presuntamente, recibe mala atención, no se le alimenta bien, está lesionada y en aparente riesgo de perder la vida.
Sin embargo, el encargado del zoológico, José Manuel Alcocer Perera, y el biólogo Ermilo José Alcalá Kauil, que tiene a su cargo el cuidado de los animales, aseguraron que el tema tendría tintes partidistas, y descartaron esa situación con respecto al felino.
Mencionaron que hay personas malintencionadas que tratan de aprovechar la situación para darle mala fama al zoológico y desprestigiar el trabajo que ahí se realiza.
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El encargado y el biólogo explicaron que las fotografías de la leona las filtró un trabajador del mismo parque, al que posiblemente sobornaron porque tendría algún descontento con la administración actual.
Resaltaron que resulta indignante su falta de ética, porque con respecto a las fotos, donde se ve a la leona inconsciente, el trabajador sabía que era parte del protocolo para aplicarle un tratamiento y llevar un control de salud.
Ante tal situación, dijeron que algunas páginas de redes sociales pertenecientes a supuestos activistas, presuntamente pagados por grupos políticos, tratan de engañar a la ciudadanía diciendo que la leona estaba a punto de morir porque estaba mal alimentada y que ni siquiera contaba con las fuerzas para moverse.
Los entrevistados explicaron que se trata de una leona de avanzada edad, de aproximadamente dos décadas, que está casi llegando al límite de su existencia, ya que el promedio de vida en cautiverio de esta especie, en las hembras, es de 15 a 16 años, y de ocho a 10 en machos, por lo que lo ha superado y se estima que podría sobrevivir un poco más.
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Su edad le hace presentar achaques y dificultad en la movilidad, pues refleja constantes molestias en patas, cadera y, por tanto, se le debe atender como un paciente geriátrico con comida y tratamiento especial.
Por ello se le recortan las garras, se le extrajeron muestras de sangre para análisis, e incluso fue llevada a ultrasonido y rayos X vigilando su evolución. Para ello se sigue un protocolo, como en todos los felinos que consiste en cubrirles los ojos y anestesiarlos para evitar accidentes. Fue en ese momento cuando se tomaron las fotografías que se pretenden utilizar para alegar un maltrato
Resaltaron que la prioridad en La Reina es la salud de los huéspedes y que para ello reciben atención veterinaria de los profesionales que ahí se desempeñan, o externamente con valoración y atención en zoológicos cercanos.