Padres de familia de la escuela primaria Felipe Carrillo Puerto, ubicada en la comisaría de Tixcancal, han advertido que no permitirán la reapertura del plantel hasta que se cumpla con la construcción de un domo y se restituya al maestro de Educación Artística. Ayer se cumplió el segundo día con las rejas de la escuela cerradas con candado.
Debido a la suspensión, los alumnos no pudieron ingresar al plantel, mientras que los padres de familia se apostaron nuevamente frente a la entrada como medida de presión hacia la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de Yucatán (Segey) y las autoridades municipales. Según mencionaron, se les prometió la construcción de un domo para que los estudiantes pudieran realizar sus actividades físicas y artísticas sin exponerse a los intensos rayos del Sol.
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Durante la manifestación, madres de familia expresaban: “¡Queremos domo! ¡Queremos al maestro de Educación Artística!”. Una de ellas tomó la palabra frente a las demás y afirmó que no abrirán la escuela hasta que les cumplan lo prometido, pues desde hace dos años han solicitado la obra, y aunque la Segey se había comprometido a gestionar los recursos necesarios, ha pasado mucho tiempo sin avances concretos. Por ello decidieron desalojar a alumnos y docentes y cerrar el plantel desde el martes.
Esta misma necesidad fue planteada anteriormente al Alcalde de la administración pasada, pero, según los padres, fue ignorada, ya que sólo se construyeron domos en el Centro de la ciudad.
A la actual administración también se le presentó la solicitud y se comprometieron a apoyar, por lo que ahora exigen su intervención para que los niños cuenten con un espacio digno donde realizar sus actividades, y no continúen bajo el Sol, expuestos a golpes de calor.
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De igual manera, exigieron el retorno del maestro de Educación Artística, quien fue reasignado a otras comunidades cercanas. Consideraron que su salida fue injustificada y solicitan a la Segey que lo vuelva a asignar a esta escuela.
Finalmente, los padres de familia advirtieron que si las autoridades educativas no ofrecen una respuesta concreta, no permitirán que nadie se acerque al plantel con la intención de persuadirlos. Han tomado el acuerdo de que hasta que se resuelvan sus demandas, los candados no serán retirados. Mientras tanto, la primaria permanecerá cerrada por tiempo indefinido.
