La tarde de este jueves, el Cementerio General de Mérida registró una baja afluencia de asistentes previo a la celebración por el Hanal Pixán. La mayoría de las tumbas lucen descuidadas y sin adornos florales, aunque algunas otras son la excepción.
En medio de un ambiente silencioso y fresco, que anuncia el arribo de los difuntos, algunas personas realizaron limpieza de criptas, principalmente, y colocaron flores como una forma de honrar y recordar a los que se han adelantado.
“No se deben de olvidar de sus difuntos. Siempre los tenemos en la mente, pensamos en ellos, nosotros no sabemos cuándo nos toca” declaró María del Rosario Moh Yáñez, quien acudió junto a sus hermanas al cementerio para visitar a sus padres y a su abuela. Durante algunos minutos permanecieron en el sitio, dejaron flores y limpiaron el polvo acumulado.
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En la misma zona, el señor Armando Quijano se encontraba junto a su esposa adornando con flores una tumba. Compartió que acudir al lugar es un presente y una forma de recordar a aquellos que dejaron importantes enseñanzas. Además, aseveró, que no solo acuden en el marco del Día de Muertos, sino que también visitan a sus familiares en otras fechas importantes.
¿Una tradición en riesgo de desaparecer?
Lenny Alonso, meridana que acudió al Cementerio General junto a su hija para dar mantenimiento al mausoleo donde descansa su abuelita, consideró que la tradición de visitar a los difuntos se está perdiendo, ya que muchas tumbas lucen descuidadas y en el abandono.
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Por otro lado, vendedores de flores, ubicados sobre la calle 66 diagonal, afirmaron que aunque la jornada de hoy registró baja afluencia, este fin de semana el cementerio lucirá abarrotado, por lo que esperan generar buenas ventas.
