La salida y llegada de vacacionistas puso en jaque ayer a los empleados de las diferentes líneas aéreas que operan en el Aeropuerto Internacional de Mérida, quienes tuvieron que emplearse a fondo para atender y dejar satisfechos a sus clientes, y sobre todo evitar atrasos significativos y/o cancelaciones de vuelos.
Tanto el mostrador de Volaris como el de Viva Aerobus registraron intensa movilidad, porque sus clientes comenzaron a llegar desde las seis de la mañana y formaron una larga fila que se extendió e invadió la entrada al mostrador de Viva, lo que obligó a los empleados formar dos filas para atender durante casi hora y media a quienes tenían que realizar trámites para registrar maletas o confirmar vuelos, etc.
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El mismo fenómeno se registró en el mostrador de Viva, ahí se juntaron los pasajeros a La Habana, Guadalajara y CDMX, donde también se controló la situación sin mayores inconvenientes.
Un panorama similar se observó en la llegada de vuelos procedentes de Guadalajara, Monterrey y la Ciudad de México, algunos con atrasos no mayores a los 25 minutos, con cientos de pasajeros, la mayor parte turistas nacionales y muy pocos extranjeros, incluso paisanos que vienen a pasar sus vacaciones o a visitar a sus familiares, como Gael Lugo y acompañantes, que estarán hasta el ocho de enero antes de regresar a San Francisco, California, como informamos en nota aparte.
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Ante este panorama, las autoridades aeroportuarias recordaron a los usuarios que deben presentarse por lo menos dos horas antes de la hora de salida de su vuelo si son nacionales, y cuatro horas antes en operaciones internacionales, porque el registro o entrega de pases de abordar se cierra 45 minutos antes de la hora del despegue. De esta manera no pierden su viaje, ya que se ha detectado que hay personas que llegan 10 minutos antes, quienes definitivamente pierden su viaje.
